 Redacción @todocircuitoweb |
Honda tomó una sorprendente decisión antes de arrancar el último Gran Premio de Catalunya: darle a Takaaki Nakagami la moto con la que Marc Márquez compitió en la última cita de Mugello, un prototipo equipado con un chasis y un basculante nuevos con los que HRC pretende dar respuesta a las demandas de sus cuatro pilotos para mejorar el comportamiento de la moto de este año.
Muchos se extrañaron de que fuera 'Taka' y no Pol Espargaró, piloto del Repsol Honda Team, quien cargara sobre sus hombros con la responsabilidad de trabajar en el desarrollo de estas piezas, máxime cuando Honda atraviesa una pésima racha de resultados y necesita más que nunca encontrar soluciones de la noche a la mañana.
Y darle las piezas más recientes a un piloto que milita en un equipo satélite en lugar de a Pol Espargaró siembra un mar de dudas sobre la confianza que tienen los japoneses en el piloto catalán, cuyo futuro está cada día más fuera de Honda.
Nakagami estuvo rodando con la moto de Marc Márquez durante los entrenamientos libres del viernes en Montmeló, pero no consiguió los resultados esperados. Así lo explicó el propio piloto del LCR Honda Team al finalizar la primera jornada del GP de Catalunya: "No he encontrado ninguna sensación positiva con las piezas nuevas, sinceramente esperaba tener más agarre, sobre todo con la moto plegada. Pero en realidad eso no ocurrió, quizás la temperatura del asfalto también influyó, no lo sé. Tampoco he visto nada negativo, pero el potencial es muy similar al que tenía con la moto anterior".
Según reveló Nakagami, la moto de 2022 y la evolución que probó en Montmeló presentan "pequeñas diferencias al frenar, la moto es un poco más rígida y detrás parece que empuja con más fuerza, y eso hace difícil parar la moto. Si a cambio tuviera un gran nivel de agarre, aceptaría este problema... pero no veo aspectos positivos", manifestó el de Chiba, que disputó el resto de sesiones del sábado y la carrera del domingo con el chasis antiguo.
La caída que sufrió 'Taka' en la primera vuelta de la carrera de Catalunya le obligó a pasar esta última noche ingresado en un hospital barcelonés con mucho dolor en su hombro derecho. Su baja para el test de este lunes ya se sabía desde ayer por la tarde, de modo que Honda tuvo que tomar la decisión de quién debía trabajar con la moto de Marc Márquez a lo largo del día de hoy, y han optado por dársela a su hermano Álex.
Según ha explicado Lucio Cecchinello a Motorsport.com este mismo lunes en Montmeló, "la dos piezas (chasis y basculante) están en el programa de pruebas de Alex durante el día de hoy", de modo que será el de Cervera y no Pol Espargaró el responsable de proporcionarle a los ingenieros de Honda el feedback que necesitan para seguir trazando el desarrollo futuro de la moto.
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Pol, por su parte, comentó lo siguiente el domingo por la tarde tras acabar el último en el GP de Catalunya, carrera en la que acusó una falta constante de agarre detrás prácticamente desde la primera vuelta: "Mañana tendremos un test importante, ahora quizás más importante todavía porque 'Taka' está fuera de juego por la caída, creo que está algo dolorido y no sé si mañana podrá hacer el test. Si tenemos cosas que probar y un piloto menos, eso significa que habrá mucho trabajo por hacer. Será importante para afrontar bien la segunda parte de la temporada", relató el de Granollers, que sigue llevando la misma moto con la que arrancó el curso en Qatar.
