 Redacción @todocircuitoweb |
El Mundial de MotoGP vuelve a la acción este fin de semana con motivo del Gran Premio de Francia en el circuito de Bugatti Le Mans, quinta prueba de la temporada en el Campeonato del Mundo de MotoGP 2021.
El Gran Premio de Francia de Motociclismo se ha disputado desde 1951 hasta en ocho circuitos distintos: Albi, Rouen, Reims, Clermont Ferrand, Le Mans, Paul Ricard, Nogaro y Magny Cours. El trazado de Bugatti Le Mans acogió por primera vez la clase reina del Campeonato del Mundo en 1969 y desde entonces lo ha hecho como Gran Premio de Francia en 33 ocasiones y una solamente, en 1991, como Gran Premio Vitesse Du Mans en sustitución en aquel momento del Gran Premio de Brasil.
Desde el comienzo de la era MotoGP, en 2002, los pilotos españoles han ganado en 12 ocasiones en Le Mans. Entre los que siguen en activo, destacan las tres victorias de Marc Márquez (Repsol Honda Team) en 2014, 2018 y 2019.
El catalán llega a Le Mans después de concluir 9º hace dos semanas en Jerez, la segunda carrera del #93 tras su larga recuperación. Ese progreso le llevó a reducir su distancia en meta con el ganador respecto a su primera carrera hace sólo un mes en Portugal.
Aprovechando la llegada del mundial a Francia, Estrella Galicia 0,0 le ha preguntado a los cuatro pilotos que patrocina en MotoGP si les gustaría ver el regreso de las míticas 500 de dos tiempos al campeonato. Precisamente aquí en Le Mans otro gran piloto de Honda, Mick Doohan, logró la victoria en 1994 y 1995 con la NSR 500.
"Pilotar una Honda NSR 500, por ejemplo la de Doohan o Crivillé, sería muy difícil al principio", reconoce Marc Márquez. "Sería muy físico, todos los pilotos de la era contemporánea ya nos hemos criado con la electrónica, que ayuda, pero también dificulta las cosas según el caso. Pero estaría bien hacer una carrera tipo 'old school' con motos más antiguas porque seguramente al aficionado le gustaría", afirma el piloto del Repsol Honda, que en el año 2015 ya tuvo la oportunidad de probar en Motegi la NSR 500 con la que Freddie Spencer corrió en 1985.
Joan Mir, por su parte, buscará repetir las hazañas de Chris Vermeulen, que en 2007 dio a Suzuki su primera victoria de MotoGP precisamente en Le Mans, o de Kevin Schwantz, que en la década de los 90 ganó en dos ocasiones con la Suzuki RGV500 con motor de dos tiempos.
El vigente campeón del mundo de MotoGP ha recordado que "Kevin Schwantz logró en Le Mans dos grandes victorias en 1990 y 1991 sobre la RGV 500 con motor de dos tiempos. Kevin es uno de mis ídolos y, aunque yo no había nacido aún, he visto vídeos suyos y su pilotaje era espectacular".
Mir no oculta que tiene la espinita clavada de probar una 500 de dos tiempos, una moto que, bajo su punto de vista, no es comparable a las MotoGP actuales: "Me hubiese gustado probar esas motos, sin duda, pero la evolución nos ha traído a la situación actual donde las motos tienen más ayudas, pero son mucho más rápidas y efectivas. Cada época es diferente y todas son buenas. No hay tiempos mejores o peores, solo diferentes", resume el de Suzuki.
Su compañero Alex Rins también ha recordado la gran victoria de Vermeulen en 2007 la Suzuki de MotoGP y sueña con poder probar una mítica 500 con motor de dos tiempos. "En 2007 aún estaba haciendo el Campeonato Mediterráneo de Velocidad. Mi sueño ya era ser piloto profesional, pero si a ese niño que vio la victoria de Vermeulen en 2007 le hubieras dicho que terminaría siendo piloto oficial de Suzuki, ¡no se lo hubiera creído!", afirma el barcelonés.
Rins no esconde su admiración por aquellas bestias indomables de 500 cc, y aunque le ha pedido permiso a Suzuki para probar una, de momento no ha tenido la oportunidad de hacerlo: "¡Aquellos pilotos eran brutales!, me encantaría probar una 500 con motor dos tiempos sin ayudas y, de hecho, ya he preguntado a Suzuki si nos dejan probar una, pero creo que actualmente sería muy complicado hacer una carrera con esas motos. Creo que la competición estaría menos igualada porque con esas motos hay que tener mucho más talento que con las cuatro tiempos y, sin duda, habría muchas más diferencias entre pilotos en pista".
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Por último, Alex Márquez también ha hablado sobre lo mucho que le gustaría probar algún día una moto de gran premio de 500. De hecho, el piloto del LCR Honda Team guarda en su garaje una CR 500 de motocross que su hermano Marc le regaló por su cumpleaños hace ahora tres años.
"Sobre pilotar una antigua 500, diría que se trata de otra época con una dinámica de pilotaje distinta", comenta el de Cervera. "Todo cambiaría mucho y sin ayudas electrónicas sería más complicado. Vamos evolucionando, lógicamente, hay más tecnología a cada momento porque se va más y más rápido y todas las nuevas soluciones se hacen necesarias. Es simplemente otra manera de encarar la competición y no se puede comparar, pero me encantaría probar una 500 y correr con ella una carrera", sentencia el #73.
