 Álvaro Navarrete @alv_navarrete9 |
Maverick Viñales acabó quinto el pasado domingo en el Circuito de Losail antes de reconocer en una rueda de prensa que la carrera no fue como él esperaba. Su salida fue mala, perdiendo toda la ventaja que había logrado en la Q2 asegurándose una primera línea que no supo aprovechar en la arrancada, bajando hasta la 11ª plaza.
A partir de ahí, el español tuvo un ritmo sólido muy similar al de su compañero de equipo y ganador de la carrera, Fabio Quartararo, abriéndose paso entre el pelotón, pero un error durante su lucha con Jorge Martín en las etapas finales le costó el podio y le hizo acabar la carrera por detrás de Alex Rins. El de Roses admite que le pidió demasiado a su Yamaha en las últimas vueltas, ya que se estaba volviendo "loco" por intentar subir al podio.
Dejando Qatar a cuatro puntos del líder actual del campeonato, Johann Zarco, el piloto de Figueres habla de cómo han sido las dos primeras carreras de la temporada: "Creo que hicimos dos resultados realmente buenos y nos vamos a casa muy contentos".
Viñales quiso aprovechar para explicar qué le sucedió en las últimas vueltas con la moto. "Estaba forzando mucho la moto, las últimas tres vueltas estaba loco, iba a por ello. Le pedí demasiado a la moto, así que la próxima vez intentaré ser más suave para sacar el máximo en caso de que necesite contraatacar".
También quiso hacer referencia a las Ducati y el porqué se volvió un poco 'loco': "Para pelear con ellas hay que ser agresivo, a veces hay que estar loco y es lo que traté de hacer, pero no conseguí la referencia de dónde estaba frenando Jorge y frené demasiado tarde cuando estaba ya realmente encima de él, así que para no tocarlo me fui un poco recto y ahí es donde perdí el podio".
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El español concluyó explicando sus sensaciones después de dos carreras en Qatar consecutivas: "En general estoy feliz porque el potencial sé que está ahí, me siento genial, siento que el equipo está trabajando de manera correcta y ahora es mi momento de mejorar".
Viñales, que estuvo todo el invierno trabajando duro en las salidas, admite que en el GP de Doha no supo reaccionar con velocidad en el momento en el que se apagó el semáforo: "En la salida el problema es ante todo el tiempo de reacción, fui demasiado lento. Después de eso la moto hizo un pequeño wheliee y casi la pierdeo de delante. En la salida vi que salía humo del neumático delantero, es cierto que no tuve el mismo potencial en la primera carrera ni el mismo agarre, pero incluso después de eso pude cerrar la brecha y remontar".
El piloto de Yamaha está convencido de que su reacción en la carrera vino cuando se vio 11º y pudo gestionar mejorar los neumáticos el resto de las vueltas: "Estoy seguro de que en la primera vuelta, cuando me vi en el puesto 11, me dije 'ok', guarda el neumático y volverás más fuerte', y eso es lo que hice. Después cambié a un mapa motor con menos potencia, y así pude ser fuerte en el tramo final. Pude rodar en 1:54 altos y 1:55 bajos, y eso marcó la diferencia, pero en líneas generales pienso que la carrera fue buena, se pudo luchar que es lo más importante. Digamos que en un mal día como hoy hemos conseguido llegar al quinto puesto, esto es realmente importante".
