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Maverick Viñales y Fabio Quartararo todavía no pueden decir si los cambios introducidos por Yamaha en la M1 2021 han dado o no resultado. La nueva pareja del Monster Energy Yamaha MotoGP completó con éxito la primera jornada de test oficial IRTA celebrada este sábado en el Circuito de Losail, 7 horas de pista abierta en la que el francés y el español tuvieron que probar muchas novedades en sus respectivos prototipos que no les permitieron realizar un time-attack en condiciones para conseguir un buen resultado en la tabla de cronometraje.
El piloto catalán fue el más rápido dentro del box del equipo oficial, marcando un 1'55.259 que le dejó 9º a medio segundo de la Aprilia de Aleix Espargaró, el responsable de liderar esta primera jornada de test.
Maverick afirmó "haberse sentido bien" durante los 51 giros que dio al circuito qatarí, aunque reconoce que todavía "necesita dar más vueltas con la moto" para poder sacar conclusiones. "De todos modos para mí fue una sorpresa hacer un 1'55 ya en la cuarta vuelta", afirma el de Roses, que acabó a menos de una décima de la mejor Yamaha del sábado, la M1 de Franco Morbidelli (7º).
Viñales confía en aprovechar al máximo la segunda jornada de test programada para este domingo y poder sacar conclusiones claras sobre el camino que debe seguir Yamaha en el desarrollo de la M1, un trabajo sin duda determinante si tenemos en cuentas que las fábricas sólo disponen de estos seis días de test en Losail antes de ultimar sus prototipos para este 2021.
"He probado varias novedades, pero la pista estaba diferente a lo que me esperaba", cuenta Viñales. "Quiero aprovechar el domingo para seguir haciendo más pruebas, porque en los próximos días test tenemos que tener en cuenta qué usar y qué no, ahora es difícil sacar conclusiones. Hay que seguir trabajando duro, aunque con esta moto piloto de forma más fluida que con la M1 del año pasado".
Su compañero de equipo, Fabio Quartararo (15º +1.020) se expresó en la misma línea que el español. 'El Diablo' explicó que "todavía es demasiado pronto para decir cuáles son los cambios más grandes después de primer día como piloto oficial, pero sí puedo decir que había más gente de azul en el box (risas). Ser piloto oficial me da más responsabilidad, pero tengo que decir que me gusta mucho".
Para Fabio, el sábado en Qatar fue un día "bueno y muy agotador" después de casi cuatro meses sin subirse a una MotoGP: "Cambiar de la R1 con la que he estado entrenando en invierno a la M1 ha hecho que me pierda un poco. Al final del día me sentía un poco mejor sobre la moto, pero tengo que seguir mejorando y haciendo más pruebas".
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Preguntado por los cambios y las mejoras que probó el francés durante esta primera jornada, Fabio insiste en que todavía no puede aportar un veredicto claro: "Hoy he probado el chasis nuevo, pero, si te soy sincero, he querido aprovechar el día para retomar el contacto con la M1 y no he ido al 100%. Tampoco les he dado mis comentarios sobre el material que estamos desarrollando. Espero entender todo mejor el domingo", concluye el #20.