Foto: Motogp.com
 Redacción @todocircuitoweb |
Aunque Franco Morbidelli ya había demostrado este año una elevada competitividad a los mandos de la Yamaha 'Spec A' del equipo Petronas ganando el Gran Premio de San Marino, fueron muchos los que se sorprendieron tras verle coronar el podio del Gran Premio de Teruel en un fin de semana que a priori se presentaba complicado para los pilotos de Iwata después de comprobar los pobres resultados cosechados en Aragón una semana antes.
Los 25 puntos que 'Franky' se aseguró en Teruel le valieron para escalar hasta la cuarta posición de la general, y lo que es más importante: el piloto italo-brasileño se metía de lleno en la lucha por el título de MotoGP todavía con una desventaja de 25 puntos respecto a Joan Mir cuando faltan tres carreras para concluir este extraño curso 2020.
Aprovechando el parón entre Aragón y Cheste, Morbidelli, ha ofrecido al periódico italiano Corriere della Sera en la que asegura estar ahora mismo en una nube al saber que, matemáticamente, tiene opciones de pelear este año por el título de MotoGP: "Pienso en el título y no me lo puedo creer. Estoy 25 puntos por detrás y todavía faltan tres carreras. Quizás debería dejar de pensar en lo difícil que lo tengo. Pero estoy realmente decidido, esta determinación me empuja a no rendirme".
El piloto romano está a punto de darle el adiós a Fabio Quartararo dentro del box de Petronas, un piloto que en estos dos últimos años "ha sido un impulso y a la vez una carga" reconoce Franco, que pasó un 2019 complicado a nivel personal después de comprobar la velocidad del francés en su primer año en la categoría reina: "Al principio no pude estar cerca de él y eso me ayudó a explorar ciertos aspectos de mi carácter que no conocía", cuenta Morbidelli, que este año ha dado un paso de gigante sobre la YZR-M1 ayudado por su jefe mecánico, Ramón Forcada.
Quartararo dejará un vació en el equipo malasio que llenará el piloto con mayor carisma de todo el paddock, Valentino Rossi, amigo íntimo de Morbidelli y una persona que estuvo a su lado cuando el italo-brasileño perdió a su padre Livio en el año 2013: "Para mí Rossi es como un tío mío, es la persona a la que más admiro. Cuando murió mi padre, sin duda fue el episodio más impactante de mi vida. Valentino me encerró en una habitación con él y me dijo 'Si me necesitas, estoy aquí'. Él me ha enseñado, me ha ayudado y me ha inspirado", dice Morbidelli respecto al #46.
Franco sabe diferenciar muy bien lo profesional de lo personal, por eso cuando pierde en pista frente a Valentino se enfada igual que lo haría con cualquier otro piloto: "Cuando los dos luchamos, yo me enfado si él me gana y él también se cabrea si lo hago yo. Lo bonito de nuestra amistad es que no nos ocultamos nada. Tenemos dos personalidades que se llevan bien juntas. Nuestra unión es mucho más fuerte que cualquier rivalidad".
A la pregunta de qué personas le han ayudado más a lo largo de todos estos años, Morbidelli tiene claro que tanto "Rossi como Carlo, mi preparador físico, jugaron un papel fundamental para mí. También está Francesca, mi novia. Fuimos juntos a la escuela, me ha acompañado desde siempre con amor y sin miedo. Las mujeres son más fuertes que nosotros", esgrime el romano.
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Por último, Morbidelli también responde un par de preguntas relacionadas con Marc Márquez, "un absoluto campeón" tal y como le define el piloto de Petronas: "Su ausencia nos ha dado confianza a todos, nos ha dado valor. Este nuevo escenario ha incrementado la ambición de los pilotos al ofrecer un contexto mucho más abierto en el que cada error pesa mucho, pasas del primero al octavo en un instante", cuenta 'Franky', que asegura "no sentir admiración" por el de Cervera: "Hay aspectos de su trabajo que no me gustan. Pero lo respeto, es muy fuerte. ¿Si es inalcanzable? De ningún modo", sentencia el #21.
