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 Redacción @todocircuitoweb |
Jorge Lorenzo ha sido hoy la estrella invitada en la inauguración del Espai Huawei Barcelona, la segunda flagship de la marca china en España, un evento en el que el ahora piloto probador de Yamaha ha hablado de su retiro dorado y de la posibilidad de volver a disputar un Gran Premio de Motociclismo en calidad de wildcard.
Durante su charla con la prensa congregada en la nueva tienda de Huawei, el #99 ha reconocido que es "un alivio a nivel de estrés de y nervios" el haber abandonado el motociclismo como piloto permanente: "Hago cosas que antes no podía hacer", ha relatado el balear, "además tengo la suerte de llevar una moto que me encanta, sin ir al cien por cien, dándome cierto margen para evitar las lesiones dentro de lo posible. Tengo lo bueno de ser piloto, quitando un poco lo malo".
Lorenzo ha revelado estar en conversaciones con una plataforma -posiblemente DAZN- para incorporarse puntualmente a su equipo de comentaristas: "Estoy negociando un contrato para ser comentarista en cuatro carreras del Mundial. Estoy aprovechando los viajes, disfrutando un poco de la vida".
Preguntado por la posibilidad de haberse llevado los secretos de Ducati y Honda a Yamaha, Lorenzo ha explicado que es algo común en el paddock, "como un ingeniero que se va a otra fábrica" ha añadido. "Fue una cosa excepcional porque acordamos finalizar el contrato de mutuo acuerdo. Es un caso particular, pero al final si uno está libre se puede llevar los conocimientos de la experiencia".
Desde que Lorenzo y Yamaha hicieron público su acuerdo, no se ha hablado de otra cosa que no sea un posible regreso del español al campeonato como wildcard, algo que posiblemente sucederá en el Gran Premio de Catalunya en el mes de junio.
A este respecto, Jorge no oculta que "es posible", aunque aún no hay nada concreto: "Todavía no he hablado, pero me tendría que ver realmente competitivo y para hacer un buen papel. Si no me veo con opciones de terminar entre los cinco primeros, sería algo un poco inútil. Con la exigencia de MotoGP es complicado. La Yamaha facilita las cosas porque es una moto poco física, amigable para el piloto. Lo iré viendo a media que pasen los días".
Lo que sí parece prácticamente seguro es que su adiós como piloto permanente es definitivo a pesar de sus buenas sensaciones con la Yamaha: "Dije en mi despedida que 99 % no, después en mi presentación como probador dije un 98. Casi con total seguridad me siento que no va a ser así. Me lo estoy pasando muy bien, tengo un trabajo que me quita muchas cosas negativas".
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Ausente en el test de Qatar que ha dado comienzo este mismo sábado, Lorenzo ha adelantado parte de sus planes para los próximos meses: "En Motegi volveré al trabajo de probador, un test de un par de días. Será con la moto de 2020. Llegamos justos a Sepang, insistí mucho en que me dejaran cualquier moto porque tenía muchas ganas de subirme, pero por temas de fiabilidad no llegamos a tiempo para las últimas tres o cuatro horas para probar la de 2020", sentencia el mallorquín.
