 Redacción @todocircuitoweb |
Joan Mir deja atrás su año de debut en MotoGP para afrontar la que será su segunda temporada en la categoría reina del mundial, de nuevo con Suzuki, la fábrica que apostó por él en 2019 para formar pareja con Alex Rins en un año decisivo para la fábrica japonesa en MotoGP.
En Hamamatsu afrontan 2020 con una moto que, sobre el papel, está a la altura de los mejores prorotipos del campeonato, una GSX-RR que este curso se viste con una decoración azul y plata que conmemora los 60 años de Suzuki en el Mundial, una moto que, según ha explicado Joan Mir a los micrófonos de DAZN, "tiene muchos cambios" más allá de los visuales: "El motor que ya probamos el año pasado, vamos a probar un chasis nuevo que veremos a ver qué tal funciona... tengo ganas de probar la nueva moto".
Después de un 2019 en el que fue de menos a más, Mir valora positivamente el llegar a este primer test IRTA de Sepang con su estado físico al 100% a diferencia del año pasado: "Soy el mismo, he tenido más tiempo para entrenar, trabajar bien, no he tenido ningún percance ni lesión este invierno, entonces me he podido preparar muy bien. Estoy contento por eso, ahora llega la hora de la verdad, aquí con 60ºC de pista veremos cómo va el tema, veremos si estamos fuertes".
El piloto de 22 años asegura estar "al 100%", aunque recuerda que el calor y la humedad típicas de Sepang afectan a todos los pilotos: "Aún así estando al 100% aquí es difícil para todos, por eso creo que es un buen examen venir aquí, porque vienes de entrenar en casa tres meses poniéndote a punto, y aquí ves rápido cómo estás".
De cara a 2020, Mir aspira a mantener la línea ascendente que ya demostró en la segunda parte del pasado curso, fijando su mirada en el podio: "Acabamos teniendo el podio muy cerquita, estando ahí en posiciones siempre delanteras. Estaría muy bien acabar como acabamos los test, entre los 3 ó 5 primeros, ese es nuestro objetivo para este año. Veremos si podemos cumplirlo, pero pinta bien".
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Por último, preguntado por su futuro con Suzuki, el piloto español explica que las negociaciones están en marcha, aunque no cierra la puerta a otras fábricas: "Hemos empezado a hablar, la verdad es que está todo avanzado, veremos, se tienen que acabar de cerrar las cosas, veremos a ver cómo acaba el tema pero pinta bien. ¿Si me ha llamado Ducati? Bueno, pues pasar, puede ser, no estoy seguro", admite con una sonrisa en la boca antes de afirmar que su objetivo, en cualquier caso, pasa por seguir vinculado a Suzuki los dos próximos años.
