 Redacción @todocircuitoweb |
Puede que los pilotos de MotoGP tengan prohibido entrenar con sus respectivos prototipos durante el invierno, pero nadie les impide aprovechar el potencial de las máquinas de superbike para seguir entrenando durante estos meses de parón vacacional.
La evolución que han sufrido las grandes motos de 1000 cc en el último lustro ha convertido a las superbikes de calle en una excelente alternativa para que los pilotos de la categoría reina no pierdan ese 'feeling' que tanto les gusta, y no son pocos los que se escapan entre semana a su circuito de velocidad más cercano llevando en la parte trasera de su furgoneta una moto deportiva con la que pasar el día.
Aleix Espargaró es uno de esos pilotos que habitualmente ruedan con motos de calle. En su etapa en Suzuki, el de Granollers guardaba en su garaje una GSX-R 1000 bien armada para entrenar, y ahora que está en Aprilia disfruta siempre de la última evolución de la RSV4 de Noale, en este caso la versión 1100 Factory con motor de 217 cv.
Esta misma semana, el dorsal #41 de MotOGP compartía en sus redes sociales una sesión de fotos tomada durante sus últimas tandas en el Circuit de Barcelona-Catalunya a los mandos de su espectacular RSV4:
Foto: @aleixespargaro
Foto: @aleixespargaro
En Yamaha, la mayoría de sus pilotos de MotoGP optan por la YZF-R1 para sus entrenos privados. Valentino Rossi y Franco Morbidelli acuden habitualmente hasta el Circuito de Misano para participar en sesiones de tandas libres junto al resto de pilotos de la VR46 Academy.
De hecho, el piloto italo-brasileño participó el pasado mes de diciembre en la primera edición de las 8 Horas de Sepang con una YZF-R1, haciéndose con la pole position.
Maverick Viñales, por su parte, también entrena de forma habitual con una Yamaha YZF-R1, especialmente ahora que el piloto de Figueras se ha trasladado temporalmente a Qatar para entrenar a diario en el Circuito de Losail.
Además, el piloto español también tiene en propiedad una YZF-R6 de circuito con la que entrena ocasionalmente junto a su coach y amigo, Julián Simón.
En Ducati, a pesar de contar con una superbike de calle de alto nivel como es la Panigale V4, ninguno de sus dos pilotos de fábrica entrenan de forma habitual con ella. Tanto Andrea Dovizioso como Danilo Petrucci prefieren la práctica del motocross antes que la velocidad, no así los dos pilotos del Pramac Racing, Pecco Bagania y Jack Miller, que sí disfrutan de sendas Panigale V4 para sus habituales entrenos en pista.
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Otro piloto ducatista, Tito Rabat, también entrena de forma habitual con una Panigale V4. El piloto catalán acudió hace unos días a Mallorca para ver a su amigo Joan Mir, que disfruta de una Suzuki GSX-R 1000 con una decoración similar a la que luce en su GSX-RR de MotoGP.
Tanto Mir como Rabat compartieron una jornada de tandas libres en el Circuito de LLucmajor.
¿Y qué ocurre con los pilotos de KTM? La marca austriaca no tiene actualmente ninguna superbike en su catálogo, y la opción de entrenar con la veterana RC8 1190 -cuya producción cesó en 2015- no es válida para sus pilotos al ser una motocicleta de dos cilindros con unas prestaciones limitadas frenta a la generación actual de grandes superbikes.
Iker Lecuona, por ejemplo, solía entrenar con una Yamaha R1 de la generación anterior antes de fichar por el KTM Tech3, además de darle duro al Supermotard con sus máquinas Husqvarna, una modalidad que siempre ha dominado.
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En el caso de Miguel Oliveira, el piloto portugués no ha tenido más remedio que 'disfrazar' una Yamaha R1 último modelo con los colores de KTM en el campeonato del mundo. De ese modo, el luso puede practicar habitualmente en circuitos de velocidad sin entrar en un conflicto de marcas.
Imagen: Sapo.pt
