 Redacción @todocircuitoweb | Google+ |
Rizoma ha reinterpretado de forma única la cultura café racer japonesa presentando su nuevo set de 15 accesorios para la Kawasaki Z 900 RS, tan elegantes como agresivos, con el que dar un toque único a la versión vintage de la marca, inspirada en la Z1 de los años 70.
El guardabarros delantero ha sido acortado en su parte frontal inspirándose en la filosofía pura de las café racer, aquella en la que si se puede prescindir de un tipo de moldura, se prescinde de ella para aportar ligereza a la moto. Como siempre, la marca italiana ofrece unos acabados excelentes y materiales de primera calidad.
Siguiendo las atractivas líneas de la moto, aparece el manillar Race Retro. El departamento de I+D de Rizoma lleva el espíritu deportivo de las café racer a la Z 900 RS con un manillar de una única pieza, pero mucho más retrasado y bajo que el OEM para recuperar la postura R, algo que se logra junto a las estriberas Pro. El manillar es compatible con numerosos accesorios de Rizoma, como los puños Urlo o Legend, de estilo retro, así como con su gran variedad de retrovisores, desde los Spy-Arm hasta los Spirit RS entre otros.
Para sentir la deportividad al completo sobre la moto, Rizoma también permite incorporar su sistema Proguard, tanto en su acabado Street como en Racing, junto con las manetas de freno y embrague RRC, de la gama de competición. Regulables y fabricadas en aluminio anodizado para aportar la mayor ligereza posible, ofrecen al piloto un tacto de circuito con toda la clase que aportan los productos de Rizoma.
La eficiencia y el estilo van a partes iguales en las Café Racer y por ello encontramos en este kit de la Z 900 RS pequeños detalles como los diferentes depósitos de líquidos de freno y embrague Next, Wave, Pure o Notch, entre otros, así como la tapa del depósito de combustible que la marca incluye en su catálogo para proporcionar a la moto ese toque destacado sobre las demás. Del mismo modo, Rizoma ha dispuesto una gran variedad de intermitentes homologados (Club, Action, Iride…) que añaden un nivel superior de estilo y exclusividad sin renunciar a ir seguro y ser visto al circular en carretera.
Por último, Rizoma culmina este kit con el soporte Fox para la matrícula, que convierte una Café Racer de serie en una moto absolutamente única y hace posible el maridaje de la cultura de las motos británicas de los 60 y 70 con el estilo italiano de Rizoma y la fiabilidad de las motos japonesas.
