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 Por Cristian Ramón Marín @Crms74 | Google+ |
Montmeló.- Jorge Lorenzo consiguió su segunda victoria consecutiva con Ducati en el Circuit de Barcelona-Catalunya. El pentacampeón del mundo había demostrado que era el principal candidato a la victoria y confirmó las sospechas, aunque una mala salida le impidió ganar como en Mugello, liderando todas las vueltas. Incluso eso lo toma como prueba de su capacidad para ganar de formas distintas, sin la clásica escapada desde los primeros metros. Está en un momento dulce.
"Primero de todo, quiero dedicar la victoria a Andreas Pérez", apuntó el #99 al hablar con la prensa española presente en Montmeló: "Mando un abrazo grande a su familia. Lo seguirá pasando fatal y toda la familia del motociclismo está triste por lo sucedido".
El análisis de lo ocurrido sobre el asfalto de Montmeló fue muy claro: "Estoy muy contento, porque ganar dos carreras con Ducati era impensable hace dos meses, cuando estaba en una situación muy difícil y ahora se ha hecho posible. Eso demuestra que no nos tenemos que rendir, que tenemos que seguir confiando en nosotros mismos, insistiendo y trabajando duro incluso en los momentos más difíciles. Esto puede cambiar en días o semanas".
Las próximas citas del calendario son Assen y Sachsenring, dos escenarios que, en teoría, son complicados para él y para su GP18. Aun así, mantiene la mentalidad positiva. "Se puede ganar en circuitos que no sean tan favorables para la Ducati, pero siempre es difícil. Hoy, en un circuito positivo para nosotros y después de haber dominado más o menos todo el fin de semana, si no hubiera seguido empujando a fondo hasta el final, Márquez me habría cogido y no habríamos conseguido la victoria. Cuando parecía una situación bastante favorable para nosotros, Márquez ha estado ahí hasta el final. No creo que se hayan acabado los circuitos favorables para nosotros. Assen no va a ser de los mejores, pero luego llegará Brno, Austria, Silverstone, Malasia... Habrá circuitos buenos, pero también llegaremos a Sachsenring, Phillip Island... Y ahí tenemos una cuenta pendiente", detalló el mallorquín.
Jorge admite que está "aprendiendo algún truco" que antes desconocía sobre su moto, y va más allá: "Yo creo que la Ducati tiene, cada vez, más puntos fuertes. Tiene una gran estabilidad frenando, tenemos bastante grip en condiciones de calor y siempre he sido un piloto al que se le ha dado bien levantar la moto y acelerar muy fuerte. Incluso comparado con los demás pilotos de Ducati. Hemos mejorado el paso por curva pero, quizás, no tenemos esa inclinación y ese paso por curva que tiene la Honda y, probablemente, la Yamaha tiene todavía".
Marc Márquez reconoció tras la carrera que Lorenzo estaba pilotando su Desmosedici igual que la Yamaha, aunque el ganador de Barcelona considera que el estilo es "parecido". "Con la Yamaha no entraba así de cruzado en las frenadas. Ahora incluso lo hago más que Dovi. La cruzo mucho en las frenadas, y con la Yamaha era muy difícil porque, si la cruzabas, era muy nerviosa y te podías caer. En cambio, la Ducati es muy estable y te permite hacer esas cruzadas. En cuanto a posición encima de la moto o paso por curva es similar. Me estoy acercando a ese nivel".
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"Sigo manteniendo lo que dije en Argentina, cuando quizás estaba en mi peor momento. Dije que Marc y yo éramos los que podíamos marcar la diferencia cuando nos encontramos bien y ahora se ha hecho más evidente. Hay pilotos buenísimos, pero quizás con diferente estilo. Marc tiene un estilo diferente al mío, pero cuando estamos bien marcamos la diferencia y podemos conseguir victorias consecutivas. A los demás les cuesta un poco más", sentenció.
Para concluir, habló sobre la lucha por el título y se mostró muy cauto: "Es muy complicado. Son muchos puntos. Esa es la mala noticia, como he dicho antes, pero la buena es que faltan muchas carreras. Como Simeone: partido a partido. Igual en Assen volvemos a estar a 70 puntos o igual recuperamos algunos más".
