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Jorge Lorenzo fue el primero en salir a pista durante el último test MotoGP que acogió ayer el Circuit de Barcelona-Catalunya. El piloto mallorquín no quiso perder ni un minuto de las ocho horas que tuvo por delante en Montmeló para tratar de solucionar un problema crítico en su Ducati GP18 que le impidió subir al podio en Le Mans el pasado domingo.
Según comentó Lorenzo en Francia, el diseño del depósito de gasolina de su Desmosedici no le ofrece el suficiente apoyo a la hora de frenar, de ahí que tenga que emplearse a fondo con los brazos para poder mantenerse sobre la moto. La consecuencia es clara y se vio en Le Mans: el #99 llegó a la segunda mitad de la carrera con los brazos agotados, perdiendo posiciones rápidamente en beneficio de sus rivales.
"No tengo apoyo en el depósito y, al cabo de cinco vueltas, me canso mucho los brazos", dijo Jorge el domingo tras quedarse fuera del podio en Le Mans. "Tengo que bajar el ritmo e ir como un palo en las frenadas. Tenemos que encontrar una solución en el test de Barcelona. Hay que buscar soluciones al depósito para tener más apoyo y que no se carguen tanto los brazos".
Efectivamente, Lorenzo no ha perdido el tiempo, y ya en el test de Montmeló probó un apéndice en su depósito que incrementa la superficie de apoyo de las rodillas y de los muslos, una solución que el periodista Fabio Marchi captó con su teléfono móvil a pie de pista, compartiendo las imágenes a través de un tuit:
La nueva solución que le han colocado a Lorenzo en el depósito. Tenía que hacer mucha fuerza con los brazos en las frenadas para no irse hacia adelante. #MotoGP #MotoGPTest #Test #testmontmelo #TestMotoGP #Lorenzo #Ducati pic.twitter.com/QpUy9F5NMl
— Fabio Marchi (@FabioMarchiMD) 23 de mayo de 2018
Si nos fijamos en la tabla de tiempos, Lorenzo demostró ser rápido en Montmeló con esta modificación de su depósito. El español fue la mejor Ducati del test, acabando tercero a 283 milésimas de la Yamaha de Maverick Viñales, que estableció un nuevo récord oficioso de 1:38.974 en el Circuit de Barcelona-Catalunya, ya con el último sector original -sin la chicane- y con un asfalto totalmente nuevo.
"Sinceramente creo que todos los pilotos están contentos con el nuevo asfalto porque ofrece más agarre, posiblemente hemos mejorado el récord en más de un segundo, no hay baches y hay mucho grip en las curvas", dijo el #99 tras el test. "Sólo en algunas frenadas fuertes los coches de F1 han creado una especie de goma y cuando pasamos por encima la dirección se cierra. Hablaremos con Loris [Capirossi] y Franco [Uncini] para limpiar esta goma para mejorar el grip de las motos".
Work done in Montmeló. See you in Mugello. 💪🏻 #JL99 😈 #BarcelonaTest Ducati Monster Energy Alpinestars SHARK Helmets Prink España Anova
Publicada por Jorge Lorenzo en Miércoles, 23 de mayo de 2018
Uno de los pocos puntos que todavía habría que mejorar, según Lorenzo, son "las dos últimas curvas, hay una especie de cambio de asfalto que crea algunos baches y la moto se mueve, veremos si podemos quitar estos dos baches. Al margen de esto estamos todos muy contentos".
Con la sensación de haber hecho los deberes, Jorge Lorenzo se prepara ya para la que puede ser una carrera definitiva de cara a su futuro en Ducati: el Gran Premio de Italia, una ronda en la que el #99 se lo juega todo si quiere mejorar su posición en las negociaciones que mantendrá con Ducati tras la cita de Mugello.
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