 Por Cristian Ramón Marín @Crms74 | Google+ |
Los buenos resultados que ofreció Andrea Dovizioso en 2017 pusieron el foco mediático sobre él. Ya era uno de los pilotos más respetados de MotoGP, pero su candidatura al título le convirtió en objeto de análisis y en el Gran Premio de Valencia le preguntaron por los dos caballos, uno negro y uno blanco, que lucía en su casco desde hacía tiempo.
En esencia, el caballo blanco representa la racionalidad. La capacidad de pensar sobre la moto y estar en calma. El negro, por el contrario, refleja el lado más visceral del piloto italiano. Ambos están en una continua lucha, disfrutan de protagonismo y permanecen en un segundo plano cuando es necesario. Armonía y lucha continuas.
"Todos usamos el caballo blanco. Y debes ver cuándo lo utilizas, en qué momento. Este año, a diferencia de otros, he conseguido utilizar de forma más instintiva el caballo negro. Lo he hecho en los momentos correctos. Conociendo mi mentalidad, no puedo vivir con irracionalidad. El caballo negro solo se puede sacar en el momento adecuado para aportar algo más, algo espectacular", explicó el #04.
Durante el curso 2017, Andrea demostró que una buena combinación entre pensar encima de la moto y un punto salvaje otorga victorias y te permite pelear por la corona: "Es siempre una mezcla de sensaciones. Utilizar las cartas que tienes en el momento adecuado. En el Mundial somos todos fuertes, simplemente hay pilotos que lo gestionan mejor".
Las fuerzas opuestas son han sido un tema común en la historia del Mundial de Motociclismo. Jorge Lorenzo lo expresa en forma de ángel y el demonio; Valentino Rossi con el sol y la luna.
Para 2018, 'DesmoDovi' ha decidido prescindir del caballo blanco y su nuevo casco llevará dos caballos oscuros para lanzar una declaración de intenciones: quiere mantenerse en la cima de la categoría reina y dar rienda suelta a su lado más irracional sobre la Desmosedici. Aunque viendo el resultado de grandes duelos el año pasado, como los de Austria y Japón, parece que ese cavallo nero es un pura sangre.
Andrea Dovizioso ha eliminado el caballo blanco de su casco para 2018
