Imagen: Suzuki Racing
 Redacción @todocircuitoweb | Google+ |
El Team Suzuki ECSTAR de MotoGP ha vivido año complicado después de renovar por completo su estructura: Andrea Iannone y Álex Rins llegaron para sustituir a Aleix Espargaró y Maverick Viñales, y las comparaciones no tardaron en llegar. El italiano ha reconocido en varias ocasiones sus dificultades y el español, que sufrió varias lesiones entre el test de Valencia y Austin, se perdió cinco carreras. El primer top cinco de la campaña no llegó hasta el Gran Premio de Japón, donde el #29 y el #42 acabaron cuarto y quinto, respectivamente.
Más allá de los problemas de adaptación y de las lesiones, existe un factor técnico que ha determinado los resultados de Hamamatsu en este curso: el motor. Quisieron mejorar la tracción, uno de sus principales lastres la temporada pasada, y cometieron un error al elegir este nuevo propulsor.
"Para ser muy honesto contigo, hemos cometido errores en alguna decisión técnica para esta temporada", reconocía Davide Brivio, team manager del equipo, en declaraciones al medio británico Crash.net: "En 2016 queríamos resolver el problema de la tracción, que era uno de nuestros puntos débiles saliendo de las curvas. Así que desarrollamos un motor más suave con algunas características que, en teoría, ayudaban al piloto en ese punto. Llevamos este motor a Jerez en noviembre del año pasado y lo probamos. A Andrea le gustó. Lo reconfirmamos en Sepang en febrero. Le gustó y lo reconfirmó. Parecía que ayudaba en el apartado de la tracción pero, a lo largo de la temporada, nos dimos cuenta que estaba creando problemas en otras áreas, como entrando a las curvas o girando. Básicamente, cancelaba los beneficios. Eso creó un problema en algunos circuitos donde la frenada y la entrada a las curvas es muy importante. Ese es uno de los problemas que hemos tenido este año".
Tras la buena actuación de Japón, Iannone y Rins también se dejaron ver en la pelea de Phillip Island | Suzuki Racing
La mejora vista en Japón, de acuerdo con Brivio, se puede atribuir al test que realizaron en los días posteriores al Gran Premio de Aragón. "Allí probamos algo para 2018, pero fue el momento de revisar algunos settings y volver a comprobar algunas partes. Nada nuevo o revolucionario, pero redondeó el paquete entre las piezas y el setting", reconoció el directivo italiano.
Este paso adelante dio "más confianza" a los pilotos, sobre todo a Iannone. Brivio le notó "más relajado" y "más confiado" con vistas al futuro: "Vemos algunas áreas en las que podemos mejorar para el año que viene. Tenemos algunas ideas. Para entender si esto funcionó realmente, debemos probar y comprobarlo. Este invierno veremos la preparación para la primera carrera. El test de Aragón fue muy positivo desde el punto de vista del humor y la motivación".
