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División de opiniones en el box de Yamaha respecto a los problemas que tanto Maverick Viñales como Valentino Rossi han sufrido durante el Gran Premio de Catalunya. El piloto de Roses, que acabó 10º en la que ha sido su peor carrera con la YZR-M1, cargó contra Michelin tras la carrera de Barcelona, exigiéndole a la marca francesa que se dejara de "excusas" y empezara "a trabajar y buscar la mejor solución para todos".
"No es la moto la que fallaba", explicaba ayer Viñales, "estoy 100% seguro, porque en Mugello era prácticamente la misma moto, y aquí no va, en Mugello va perfecta, en Le Mans perfecta, en Jerez la moto no va, en Austin iba perfecta hasta la carrera, así que muy mosqueado, porque son puntos que vamos regalando y al final de temporada nos harán falta".
Sin embargo, su compañero de equipo, Valentino Rossi, no comparte la misma opinión, y apunta de forma clara y directa a la Yamaha M1 2017 como la culpable de todos los males que ambos están soportando esta temporada. "La moto sufre mucho subviraje", explicaba ayer el de Tavullia a la prensa, "no tengo la confianza entrando en curva que tenía el año pasado. La moto no gira como debería, tenemos que tumbar más y eso hace que sometamos a las gomas a más estrés".
El italiano, que acumula aquí seis victorias en MotoGP desde el año 2002, aseguraba estar "muy triste por este fin de semana. Éste es uno de mis circuitos favoritos, el año pasado gané y esperaba haber completado una buena carrera. Pero estaba preocupado, porque el nivel de grip era similar al de Jerez. El año pasado esta fue mi mejor carrera del año y la peor de esta temporada, algo muy extraño"
Valentino, que acabó ayer 8º, pone como ejemplo el resultado de las dos Yamaha satélites del Tech 3 (Zarco fue 5º y Folger 6º) para demostrar que el problema no está en los Michelin: "La moto antigua tiene otros problemas, pero estresa menos el neumático trasero y es más fácil de conducir. He pilotado la M1 durante muchos años y soy un buen piloto de pruebas, y con esta moto es dífil hacer la curva".
Desde que la temporada arrancó en Qatar, Valentino fue uno de los pilotos que más presionaron a Michelin para regresar a la carcasa delantera 070 (más rígida) para intentar solucionar sus problemas en el tren delantero. Los pilotos votaron a favor de este cambio en Le Mans, y a partir de Mugello ya pudieron emplear este neumático.
Sin embargo, los problemas de Valentino siguen ahí: "Incluso siendo competitivo, como lo fui en Le Mans y Mugello, el problema de delante siempre ha estado ahí. Aquí además hemos pagado el hecho de no haber hecho test antes de la carrera, optamos por hacerlo en Francia, pero son decisiones que ya se habían tomado meses antes".
El #46 reconoce que ya se dio cuenta de este problema en Valencia, nada más subirse a la moto de 2017: "Cuando probé la moto nueva en Valencia, rápidamente tuve esta sensación. Pero Viñales venía de la Suzuki, estaba motivado y fue el más rápido en los test y luego empezó ganando. Todo parecía ir bien así que volver de nuevo hacia atrás siempre es malo".
¿Qué solución le ofrece Yamaha a Valentino? "Después del test de Jerez, le pedí algunas cosas a Yamaha", responde el italiano, "mañana probaremos algunas [en el test del lunes de Montmeló] y veremos si han cumplido con mis peticiones. Ahora mismo debemos centrarnos en nosotros, hay cinco pilotos en 28 puntos y Maverick es el líder, no podemos olvidar eso. Yo, de no haberme caído en Le Mans, estaría cerca de él, está siendo una temporada extraña, muy nivelada. Tenemos que ser buenos a la hora de limitar el daño cuando las cosas vayan mal y sacar provecho cuando vayan bien".