 Por John Fernández | Fotos: Pirelli@johnfervar |
Rutas de Andalucía; bajo el sol cambiante del sur peninsular, con carreteras que serpentean entre olivares, montañas y pueblos encalados, hemos puesto a prueba las nuevas Pirelli Scorpion Trail III, la última evolución del neumático italiano pensado para motos trail asfálticas o de uso mixto ligero (muy ligero). Lo hemos hecho en condiciones reales, con una mezcla de autovía, nacionales, tramos de curvas y alguna que otra escapada por caminos rotos. ¿El resultado? Un neumático que transmite confianza desde el primer kilómetro y que parece haber encontrado un equilibrio muy logrado entre agarre, agilidad y confort. Pero vayamos por partes.
Con la teoría en la mano, esta tercera generación mantiene el espíritu aventurero del modelo anterior, pero afina notablemente su rendimiento en carretera. Se nota que Pirelli ha querido ir un paso más allá en el compromiso entre versatilidad y tacto deportivo. Importante el hecho de que ahora es un 90% carretera / 10% pista. Así que las hemos probado sobre todo tipo de motos con diferentes perfiles: Ducati Multistrada (V2 y V4), DesertX, Moto Guzzi Stelvio o las Triumph Tiger 900 y 1200.
Nos cuentan que las estructuras delanteras del Scorpion Trail III derivan directamente de la experiencia de Pirelli en competiciones Supersport, (y probamos bien probado) que eso se traduce en una mejora notable en la conducción y el agarre. En particular, las medidas radiales incorporan una construcción con cintura de acero a 0 grados, que proporciona una decentísima estabilidad incluso a altas velocidades.
Por su parte, los neumáticos traseros presentan estructuras altamente rígidas que permiten una conducción deportiva en todo tipo de escenarios, garantizando además una elevada estabilidad bajo cualquier condición de carga.
Ya desde los primeros metros estrenando la goma, transmite una sensación de aplomo muy marcada, como si la moto estuviese anclada al asfalto; calienta rapidísimo. De hecho, una de sus virtudes más claras es su facilidad para entrar en curva, con una respuesta progresiva y lineal que inspira seguridad tanto a pilotos experimentados como a quienes aún están cogiendo confianza con motos grandes.
Lo primero que llama la atención es el rápido calentamiento. A los pocos minutos, el neumático ya está en temperatura y permite rodar con seguridad, incluso en mañanas frescas. La carcasa ofrece una rigidez intermedia, que filtra bien las irregularidades sin perder el contacto firme con el asfalto. Pirelli ha hecho un trabajo notable para mantener ese tacto directo con el tren delantero, algo fundamental en motos de cierto peso como las trail medias y grandes.
En curva, el Scorpion Trail III se muestra neutro y predecible. Y todo motorista sabe lo importante que es eso. No cae bruscamente ni se resiste: entra con suavidad y se mantiene firme durante toda la trazada. La sensación al inclinar es la de un neumático “redondo”, sin sorpresas ni baches de agarre. Incluso cuando el ritmo sube, no transmite nerviosismo. En ese sentido, recuerda más a un neumático sport-touring que a uno mixto, y eso es una gran noticia para quienes pasan la mayoría de su tiempo en asfalto.
Bendita Andalucía, todo el día con sol encima del casco. El problema es que no pudimos testear al límite el nivel de agarre en mojado. Aunque el recorrido de pruebas tuvo solo algún tramo húmedo, la teoría dice que el dibujo en forma de “V” y el compuesto de última generación hicieron su trabajo: buena evacuación del agua y una sensación constante de adherencia, sin esos momentos de duda que suelen aparecer con neumáticos de corte más aventurero.
En frenadas fuertes y cambios de dirección, el Scorpion Trail III se comporta con una estabilidad sobresaliente. Los casi 900 kilómetros de ruta se comportaron con un tacto deportivo, sin flaneos ni movimientos raros. La moto va por donde le dices, y eso se agradece tanto en curvas rápidas como en zonas reviradas de montaña. Y para prueba, la foto:
Otra sorpresa agradable ha sido el confort general. Aunque el neumático está claramente orientado a un uso rutero y dinámico, filtra bien los baches y no transmite vibraciones molestas. Eso se agradece especialmente cuando se encadenan muchos kilómetros por carreteras secundarias, como llegamos a hacer. Barro, polvo... De todo. Las carreteras por las que fuimos no eran precisamente fáciles. Pero la goma respondió. En ese sentido, cumple con lo que se espera de un neumático premium para grandes trail ruteras que buscan asfalto en su mayoría.
Un buen resumen podría ser que el nuevo Pirelli Scorpion Trail III es un neumático que transmite mucha seguridad y que permite disfrutar de la conducción tanto a ritmo tranquilo como cuando uno quiere exprimir la moto. Es cómodo, estable y muy comunicativo. Y aunque su diseño sugiere cierto guiño al mundo trail, su rendimiento real es netamente asfáltico.
Ideal para quienes buscan una goma versátil, pero no quieren renunciar a las sensaciones deportivas en carretera. Especialmente esto último. Sin duda, una opción muy seria para motos como la BMW F900GS, la Ducati Multistrada V2, la Yamaha Ténéré 700 o la Triumph Tiger 900 GT, entre otras.
Por último, recordemos, además, las medidas en las que están disponibles:
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Aquí van unas cuantas fotos más de la prueba y del viaje:
