REPORTAJES

Noyes Camp: mucho más que un curso de dirt track

Publicado el 14/08/2013 en Artículos

noyes camp

Empieza el show americano


Sábado 4 de mayo, son las 8 de la mañana y estoy puntual como un reloj en el Circuito de Motorland Aragón. Kenny me había dicho que fuese siguiendo los carteles que te llevan hasta el Circuito de Karting para poder llegar hasta el Noyes Camp. Dicho y hecho, tras cruzar tres rotondas estoy entrando en el parking del circuito de karts, que por cierto es espectacular, no me extraña que aquí se disputen todo tipo de campeonatos internacionales.
 
Encuentro el box en el que Kenny tiene montado su cuartel general y por fin nos conocemos. En ese momento me presenta a Paco, el encargado mecánico siempre dispuesto a ayudarnos con lo que fuese, y al resto de cursillistas que me acompañarán en esta aventura: Toñín, Darío, Cooper Crafar -hijo del expiloto mundialista Simon Crafar- y Robertino Pietri, piloto del Team Calvo que este año disputa el CEV en la categoría Stock Extreme con una Kawasaki ZX-10R. 

Y es que no es difícil coincidir en alguno de los cursos del Noyes Camp con pilotos en activo de cualquier modalidad, especialmente de velocidad.
 
Hechas las presentaciones es el momento de cambiarnos de ropa y subirnos a las motos. Kenny ha elegido para sus cursos la Kawasaki KX 140L, una moto de cross de tamaño medio convenientemente adaptada al dirt track, con neumáticos más anchos y con tacos más cortos.

Su motor de cuatro tiempos entrega unos 15 cv de potencia, suficientes para divertirte en un óvalo de arena sin llevarte sustos por culpa del exceso de gas. 

noyes camp   noyes camp
 
Nos subimos cada uno a una moto -yo me quedo con la 9, el número de Kenny- y ponemos rumbo al óvalo de arena. Una vez allí, Noyes nos dice que salgamos a tantear la moto, despacito, simplemente a entrar en contacto con ella. Damos unas vueltas, nos paramos y llega la primera clase teórica: la mayoría hacemos todo mal. En lo que más hincapié hace Kenny es en la posición del cuerpo sobre la moto: es importantísimo situarte lo más delante posible, con tus pelotas prácticamente encima del depósito. Y nada de descolgarse como en las motos de velocidad, todo lo contrario, hay que tirar la moto al suelo y mantener la espalda recta jugando con el pie izquierdo para mantener el equilibrio, ¡casi nada!
 
Con la teoría aprendida, empezamos con las primeras clases prácticas. Paco coloca varios neumáticos en una de las curvas del óvalo y Kenny se sitúa justo en mitad de la curva para vernos pasar y comprobar si le hacemos caso o no. Insiste en que la técnica es sencilla: antes de llegar a la curva bajas dos marchas, sueltas el embrague, acaricias el freno trasero y tiras la moto hacia dentro, para levantarla después lo más rápido posible y salir con el gas a fondo. OK Kenny, la técnica es sencilla, pero la práctica... 

noyes camp   noyes camp
 
Pasamos parte de la mañana con diversos ejercicios hasta que más o menos le vamos pillando el truco. Entonces llega el momento en el que Paco nos quita el freno delantero a todos y es hora de rodar de forma libre en el óvalo. Aquí Kenny aprovecha para empezar a grabarnos en vídeo y de paso, tras dar unas vueltas a nuestra rueda, nos va parando uno a uno para decirnos en qué estamos fallando y cómo podemos mejorar.
 
En mi caso (y no es por tirarme el pegote) se sorprendió de lo bien que iba para no haber hecho nunca dirt track ni tener experiencia en el mundo off-road, aunque aún estaba a años de luz de marcarme una de esas espectaculares derrapadas que a Kenny le salen sin esfuerzo alguno. ¡Menuda envidia!


La famosa bota de hierro
 
Llega la hora de comer y la verdad es que agradezco una parada larga, porque el cansancio se empieza a notar. Más aún en mi pierna izquierda por culpa de la dichosa bota de hierro, ¡perdona, que todavía no te he contado lo que es! Para poder apoyar el pie izquierdo en el suelo mientras derrapas y no engancharte con nada, en dirt track se utiliza una especie de suela de hierro que hace más fácil el deslizamiento.

El problema es que al ser de metal pesa lo suyo, y al final acabas con la pierna reventada de tanto subirla y bajarla con ese peso extra. Por cierto, si vas al curso pregúntale a Kenny cómo las consiguió, porque le costó lo suyo...
 
Termina la hora de la comida y volvemos de nuevo al óvalo. Empezamos con unas tandas libres para entrar en calor, y al rato Kenny nos propone una divertida carrera de relevos. ¡Nos los pasamos pipa! En lugar de ocupar todo el óvalo, utilizamos una variante en la que entramos en la parte interna para tener un par de curvas cerradas que se convirtieron en un punto clave para los adelantamientos.

Aquí las risas están aseguradas, porque hay toques continuos y piques muy sanos, te aseguro que en más de una ocasión te empezarás a reir dentro del casco y te costará pilotar.
 
bota hierro dirt track   noyes camp
 
Decir que a estas alturas del día, Robertino Pietri nos estaba dando a todos una paliza importante. El piloto venezolano ya tiene tablas en esto del dirt track, de hecho ha estado en el rancho que Colin Edwards tiene montado en Montgomery (Texas) donde se estuvo batiendo el cobre con varios pilotos mundialistas, así que con nosotros lo tenía chupado. Menos mal que ahí estaba Kenny para equilibrar la balanza.
 
Finalizado este primer día, y tras una relajante ducha en el hotel, todos los integrantes del curso estuvimos cenando con Kenny en un céntrico restaurante de Alcañiz, donde aprovechamos para ver los primeros vídeos onboard del día y darnos cuento de lo lentos que somos. ¡Os juro que sobre la moto pensaba que iba a batir el récord del óvalo!

<- Página anterior | Siguiente página ->
 

Páginas:  1  2  3  4 

Tags: noyes camp, dirt track.


Sólo los usuarios registrados pueden añadir un comentario. Por favor, inicia sesión o regístrate a través de este enlace.