
Si eres habitual de los circuitos, seguro que más de una vez te ha tocado compartir pista con alguna dos tiempos de pequeña cilindrada. Ya sabes, esas chicharrillas pilotadas por chavales que apenas te llegan a la altura del ombligo, y que van endemoniados. Pues bien, hemos tenido la suerte de probar una Metrakit Pre GP 125. Sólo te daré dos cifras: 32 cv y 80 kg. No suena mal, ¿verdad?
La gente de Metrakit no es precisamente nueva en esto del mundo de la competición. Desde 1976 llevan realizando distintos componentes y piezas para motos, y hace poco comenzaron a vender sus propias "carreras-cliente", casi todas de dos tiempos y pequeña cilindrada. Su línea de producción está basada en la evolución propia de un piloto desde muy joven. Su catálogo arranca con la Mini GP de 50 cc (10,5 cv y 65 kg) y su versión R, potenciada (13,5 cv). A continuación, Metrakit te ofrece su MiniGP XL 80, con un motor de 79,9 cc y 23 cv.
Y por último, la reina del catalogo, y la moto de la que hoy nos ocupamos: la Metrakit Pre GP 125. Sin duda alguna, se trata de un modelo muy especial, ya que es el paso previo a una 125 de GP, y una excelente base para que los pilotos puedan ir adquiriendo formación a un precio asequible. Su precio es de 8.300 € + IVA, practicamente el doble de lo que cuesta una moto de 125 cc deportiva de calle. Pero claro, estamos hablando de una moto que no tienen nada que ver con estas últimas, a excepción de su cilindrada.
Al margen de estos modelos, Metrakit también ofrece un modelo off-road para los más pequeños, la SRM 110, equipada con un motor de 4 tiempos. Para los más estrafalarios, Metrakit también ha creado un modelo muy especial, la Fun. Equipada con un motor de 79 cc, desarrolla 23 cv de potencia. Esta Fun no deja de ser, en realidad, una Mini GP naked con manillar alto.
Además de todo esto, Metrakit organiza distintos campeonatos monomarca por Europa y EE.UU. con las motos que ellos mismos venden. Son unas magníficas copas de promoción para pilotos jovenes que no cuentan con muchos recursos económicos para poder competir y mostras así al resto de la gente su talento. La pena es que los medios de comunicación no presten atención a este tipo de eventos, que constituyen la auténtica cuna del motociclismo.
El motor
Metrakit te da la moto completamente preparada, para que sólo tengas que gastarte el dinero en ruedas y gasolina. Es más, parte del motor viene precintado para que no puedas modificarlo, de modo que sólo puedes realizar las operaciones de mantenimiento más básicas. Si sufres alguna avería gorda, tendrás que enviar el motor completo a la gente de Metrakit. Motor que, por cierto, tiene sus orígenes en el campo, ya que pertenece a los suecos de Husqvarna, y es el mismo que equipa en sus motos de cross de 125 cc. Lógicamente, en el caso de la Pre GP, se ha dulcificado su comportamiento para adaptarlo a la conducción en circuito, dejándolo en 30 cv declarados (35 cv en origen), que en banco de potencia son casi 32.
Por debajo de 7.500 Rpm está casi muerto, como buen 2 tiempos que es, y apenas mantiene la velocidad. Pero una vez llegas a esta cifra, la cosa cambia de manera radical. La moto empieza a empujar con fuerza y los cambios de marcha se suceden sin parar. Nada que ver con una moto de 4 tiempos, donde la aguja sube con más pereza. Aqui el motor gira como un demonio, y es vital estar muy pendiente del cambio. El régimen útil es bastante estrecho, ya que a partir de 11.500 Rpm la moto deja de empujar, y es necesario pasar a la siguiente marcha. Como puedes observar en la "puntiaguda" gráfica que te adjuntamos (pincha en ella para ampliarla), el motor tiene un bache algo considerable entre las 7.600 y las 7.800 Rpm, por eso lo mejor es no dejar caer nunca la aguja por debajo de las 8.000 Rpm si no queremos quedarnos parados a la salida de las curvas.