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Valentino Rossi puso ayer punto y final a una de las temporadas más duras de su carrera deportiva. El italiano completó el segundo y último día de test de MotoGP en Valencia, y lo hizo con gesto serio y rostro cansado, síntoma de que necesita unas vacaciones urgentes. A pesar de los kilómetros acumulados desde el pasado viernes -con los primeros libres del GP de Valencia-, el de Tavullia trabajó ayer sin descanso en Cheste para seguir entendiendo mejor el comporamiento de los Michelin, acumulando un total de 57 vueltas hasta marcar un 1'31.498, dejándole sexto en la tabla a 428 milésimas de Márquez.
La mayor parte del tiempo se mantuvo a los mandos de la YZR-M1 de 2015, el modelo actual, con el objetivo de aclimatarse mejor a las gomas del año que viene, dejando el desarrollo de la M1 2016 para el test de Sepang. Valentino aseguró que "este segundo día ha sido bastante positivo, y ha sido largo. He hecho muchas vueltas y he intento mejorar mis sensaciones con los nuevos neumático. Estoy bastante contento porque por la tarde mis tiempos no han sido tan malos. He hecho varias tandas largas para entender las gomas y siempre fui rápido. Hemos mejorado mucho la moto respecto al martes y los neumáticos, sobre todo el delantero, nos han dado mejor feedback, y eso es lo más importante. También hemos trabajado un poco más en el sistema electrónico del próximo año, que también ha mejorado mucho respecto a ayer, pero todavía tenemos trabajo"


Lo que Valentino tiene claro es que tanto él como su equipo deben "seguir trabajando porque parece que nosotros tenemos algo más de problemas con los Michelin. Sobre todo en la entrada de la curva y en la distribución de pesos. Está claro que sólo es sun primer paso. Pero no está tan mal porque, de todos modos, hemos mejorado un segundo respecto al martes, así que tenemos que seguir trabajando".
"Hoy hemos mejorado mucho el feeling con los neumáticos", añade el italiano, "sobre todo con el delantero, me ha hecho ser optimista. Esto quiere decir que si trabajamos y acumulamos más kilómetros podremos resolver los problemas. Está claro que tenemos mucho que hacer porque la Yamaha aprovecha mucho el neumático delantero, así que necesitamos el equilibrio correcto. Respecto a la electrónica hemos avanzado mucho del martes al miércoles. Todavía no está al nivel de este último año, está claro, pero creo que podremos mejorar rápidamente. El freno motor y, sobre todo, la aceleración, anti-wheelie y control de tracción. Todo funciona un poco peor, pero ya nos los esperábamos".
Preguntado por su estado anímico tras perder el campeonato el pasado domingo, Rossi confiesa que "sinceramente, ha sido bastante difícil. Y todavía lo es. Pero hoy ya he estado un poco mejor. Ahora es difícil encontrar la motivación después de todo lo que ha pasado; el domingo todavía estaba con la adrenalina de la carrera, el lunes fue duro y el martes me costó pilotar. Sé que necesitaré tiempo, no tanto para olvidarlo, que es imposible, pero al menos para asimilar todo. Será importante recuperar fuerzas este invierno, relajarme y sobre todo recuperar la suficiente motivación para volver a lo más alto. No haré nada especial, veré películas, iré a cenar con amigos, a esquiar... no tengo grandes preocupaciones, sólo pasarlo bien estos meses".


Por el momento, todo parece indicar que los test para el Yamaha Racing terminan en Valencia, aunque el italiano no descarta un último entrenamiento en Jerez a final de año. "Yamaha no lo ha decidido aún. No sabemos si iremos o no. No creo que un test más a finales de noviembre cambie las cosas de cara al campeonato. Pero si Yamaha decir ir estaré preparado". asegura.
¿Se igualará el campeonato con los Michelin y la electrónica única? Valentino piensa que sí: "Sería bueno si de verdad el piloto puede marcar la diferencia, creo que ese es el objetivo. Estos neumáticos son más 'humanos', espero que las carreras sean más divertidas, como en los viejos tiempos".
Fuera del tema deportivo del día, los periodistas presentes en Valencia no podían dejar de preguntarle a Rossi por dos temas de actualidad. El primero, la rueda de prensa que ofreció el miércoles HRC para anunciar que, de momento, seguirán sin mostrar la telemetría de Marc en las últimas carreras por petición de la FIM y Dorna, con el onjetivo de no echar más leña al fuego: "Habrán dicho que lo hacen por el bien del motociclismo. Pero me gustaría ver cómo demuestran con telemetría que yo le dí una patada", respondió Valentino.
La otra cuestión de actualidad era, como no, el posible fichaje Casey Stoner por Ducati para desarrollar la Desmosedici GP16 a partir del próximo año, con posiblidad de disputar alguna carrera como wild-card. "He leído lo de Stoner, estoy contento con él y por Ducati", respondía Rossi de forma breve y seca.