 Por Cristian Ramón Marín @Crms74 | Google+ |
Valentino Rossi resistió el ataque de Jorge Lorenzo en el circuito de Motegi y afrontará la siguiente cita del mundial (el próximo fin de semana en Australia) con una ventaja de 18 puntos sobre el español, gracias a un segundo puesto por delante de su rival en la lucha por el título. Sin embargo, la primera mitad de carrera en Motegi auguraba lo contrario. Lorenzo impuso su ritmo y aumentó la distancia con Rossi hasta los 3.5 segundos. “La salida fue buena. En la primera vuelta Jorge era más fuerte que yo y podía mantener la diferencia, también porque yo no me sentía al cien por cien", explicaba el nueve veces campeón del mundo.
Según pasaron las vueltas, la pista se secó y el rendimiento del líder de la prueba disminuyó. Rossi pudo alcanzarle y ponerse por delante al aprovechar una colada del español en la curva tres. A partir de ese momento, Rossi abrió hueco y obtuvo una cómoda renta para el resto de la carrera.
Valenrino Rossi se colocó primero en la salida, pero no pudo mantener el ritmo de Jorge Lorenzo a principio de carrera
"Físicamente no fue demasiado mal, pero mentalmente ha sido muy duro mantener la concentración todo el rato", dijo el heptacampeón de MotoGP, que también sufrió el desgaste de los neumáticos. "Cuando la pista empezaba a secarse, sentía como que estaba en un barco en el mar, la moto se movía hacia todos lados. Tres o cuatro veces, cuando tocaba el acelerador, sentí que el tren delantero se iba y dije: '¡No, no, no!'", explicaba a Crash.net.
Rossi consiguió su objetivo: aumentar la distancia con su compañero de equipo en la general, algo "muy importante para el título". Por esta razón, está "muy feliz", antes de llegar a Phillip Island, un circuito que le vio proclamarse campeón del mundo en 2001 y 2004 y en el que ha subido a lo más alto del podio de la categoría reina en seis ocasiones.
