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Tras salir de un largo coma el pasado 16 de junio, Michael fue trasladado al hospital de Lausana para estar más cerca de su mujer e hijos. Unos meses más tarde, en septiembre, el 'Kaiser' abandonó de forma definitiva el hospital para marcharse a su residencia a orillas del Lago de Ginebra, en Suiza, donde su esposa Sabine había preparado una sala medicalizada para que Schumacher recibiese los cuidados necesarios.
La información sobre su estado de salud llega con cuentagotas a los medios de comunicación, de ahí que muchos se agarren a declaraciones poco fiables sobre los avances que Michael está consiguiendo en esta dura lucha que tiene por delante.
La última polémica la ha desatado el ex-piloto francés de F1 Philippe Streiff, que concedió una entrevista al diario Le Parisien en la que aseguraba que Michael Schumacher había llorado tras ver a su familia, y que podía comunicarse con ellos a través de los ojos.
La responsable de desmentir esta información ha sido la portavoz del alemán, Sabine Kehm, que niega rotundamente estas afirmaciones. "Estoy muy sorprendida por las declaraciones de Philippe Streiff, no puedo confirmar eso", ha comentado a Reuters. "Sólo puedo decir que no se de dónde ha conseguido el señor Streiff su información, porque no tiene contacto con nosotros y nunca lo ha tenido".
A la pregunta de cuál es el estado de salud de Schumacher, Kehm sigue sin facilitar información clara: "Todavía necesitamos mucho tiempo, irá para largo y será una batalla difícil. Está haciendo progresos, aunque siempre acordes con la gravedad de su situación".
Aquí tienes un vídeo de Schumacher durante unos entrenamientos en Brno sobre la Honda CBR 1000 RR Fireblade con la que disputó el IDM Superbike en 2011: