KTM encara 2026 con un mensaje directo a su mayor valor de futuro, Pedro Acosta. El murciano cerró 2025 como el piloto más fuerte de la estructura, y en Mattighofen ya no disimulan la urgencia: el proyecto de MotoGP necesita rendir al máximo antes de que el mercado de 2027 se abra y las decisiones del campeón de Moto2 se vuelvan definitivas. Así lo ha explicado Pit Beirer, jefe de KTM Racing, en declaraciones recogidas por Speedweek.
"2027 es una cosa, pero para Pedro, 2026 es crucial. Es exigente y lo da todo. No podemos simplemente pasar la próxima temporada con la esperanza de que llegue 2027. Tenemos que ofrecer un rendimiento brutal el año que viene; 2026 también determinará nuestro futuro en este paddock", afirmó Beirer a Speedweek.
El mensaje interno es claro: hay que avanzar en dos direcciones a la vez. Por un lado, sostener el crecimiento competitivo del actual proyecto. Por otro, empujar desde ya el desarrollo de la futura moto de 850 cc, que entrará en juego con el nuevo reglamento.
"Tenemos que trabajar en paralelo, apoyando constantemente a Pedro con mejoras a la vez que impulsamos el proyecto para 2027", explicó Beirer. "Por eso también decidimos seguir confiando plenamente en nuestro equipo de pruebas de dos personas. Estamos encantados de contar con Dani y Pol; se complementan a la perfección. Aunque sería más fácil y económico trabajar con un solo probador, para nosotros este es el plan adecuado para avanzar en ambos proyectos".
La estrategia pasa también por retener a toda su alineación actual más allá de 2026: "Queremos mantener a los cuatro pilotos para 2027", subrayó el director deportivo. Beirer recuerda que la decisión de congelar el desarrollo del motor actual permitió liberar recursos y enfocarse antes en el propulsor de 850 cc. El objetivo es claro: tener algo convincente que mostrarle a Acosta cuando toque decidir su futuro contractual.
Según Speedweek, Beirer también señaló que el español no se mueve por cifras económicas, sino por competitividad real: "Lo cierto es que a Pedro no le interesa cuánto dinero podamos pagarle en 2027; quiere saber si conseguirá una moto que gane carreras".
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La primera victoria se está haciendo esperar, pero en KTM nadie duda del hambre del murciano: "Pedro y su jefe de equipo, Paul Trevathan, harían cualquier cosa por una victoria", aseguró Beirer, reflejando el punto de tensión en el que se encuentra la relación: si KTM quiere que Acosta lidere su proyecto en 2027, 2026 no puede ser un año de transición. Tiene que ser un golpe sobre la mesa.
