El Gran Premio de Australia empieza bien para Marco Bezzecchi. Apenas unas horas después de deshacer las maletas, Dirección de Carrera le comunicaba al de Aprilia la factura a pagar por su accidentada actuación en Indonesia. Un jarro de agua fría en forma de sanción que hipoteca su fin de semana antes incluso de arrancar por primera vez su RS-GP.
Marco cargará con una pesada losa durante la carrera del domingo: una doble Long Lap Penalty. Este es el castigo que los comisarios han considerado oportuno por la acción en la primera vuelta de Mandalika, donde un error de cálculo del italiano acabó con Marc Márquez por los suelos y, para desgracia del ilerdense, con una nueva fractura en su ya castigado historial.
La decisión no es arbitraria ni desmedida a ojos del Panel de Comisarios. La nota oficial especifica que se aplica la doble penalización al considerar que Bezzecchi es reincidente en este tipo de lances, señalando lo ocurrido en el Gran Premio de Argentina, cuando también tiró a Fabio Quartararo.
Lejos de buscar excusas o entrar en polémicas, el piloto de Roma asumió el veredicto con la resignación: "Tengo que aceptar la sanción. Quiero decir, somos pilotos y siempre queremos un castigo menos duro", reconoció con sinceridad el dorsal #72.
Pero la sanción deportiva no es el único fantasma que persigue al italiano en su periplo por las antípodas. El cuerpo también le pasa factura. La violenta caída en Indonesia le dejó secuelas físicas que aún arrastra y que pondrán a prueba su resistencia en el exigente trazado australiano. "Todavía tengo un fuerte dolor en la espalda, pero estoy bien", afirmó,
El propio Bezzecchi puso palabras a la angustia de los momentos posteriores al impacto en Mandalika:. "Por culpa de mi espalda, al principio no podía respirar. Me detuve y esperé hasta poder coger aire de nuevo", confesó. "Si alguna vez te han dado un golpe en las costillas o en la espalda, puedes entender cómo es esa sensación, solo que mil veces peor".
Con la misma franqueza, el dorsal 72 entonó el 'mea culpa' al reconstruir la jugada que lo cambió todo. "No quería hacer una maniobra de adelantamiento", aclaró, antes de admitir su error. "No esperaba que Márquez frenara tan fuerte. Pero fue mi error, porque yo estaba detrás de él; fue un error de cálculo por mi parte", sentenció.
En su análisis, Bezzecchi apuntó a un factor que sin duda empeoró las consecuencias para ambos. "Iba un poco demasiado rápido, levanté la moto para poder frenar más fuerte. Desafortunadamente, entonces toqué la parte trasera de su moto", explicó. "El problema fue que él volcó en la grava junto a la pista. De lo contrario, las consecuencias para él no habrían sido tan graves. Yo también me destrocé el cuerpo en la grava".
A pesar de este panorama desolador, con una doble penalización que le obligará a una remontada épica y un físico mermado, Bezzecchi se niega a dar el fin de semana por perdido: "Lo afronto como cualquier otro fin de semana. No puedo empezar con mal humor por esto", advirtió con firmeza.
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Su hoja de ruta es clara: apretar los dientes y luchar contra los elementos. "Tengo que dar lo mejor de mí e intentar conseguir el mejor resultado posible el domingo", proclamó. Sabe que el reto es mayúsculo en un circuito "muy rápido y físicamente desafiante", pero encuentra un pequeño aliado en la meteorología: "No hará tanto calor, lo que me ayuda. Trabajaré duro para sacar lo mejor del fin de semana".