El Mundial de Superbikes encara su recta final al rojo vivo, y no solo por la batalla por el título. Álvaro Bautista, en sus últimos compases como piloto oficial de Ducati, ha decidido que no se morderá la lengua. El talaverano, tras un fin de semana positivo en Estoril que se ha saldado con tres podios, no dudó en valorar las palabras de Toprak Razgatlioglu, a quien acusa de tener un discurso sobre el respeto en pista que no se corresponde con sus acciones pasadas.
El detonante fue la polémica surgida a raíz de un adelantamiento de Andrea Iannone al piloto turco. Razgatlioglu se quejó de la agresividad de la maniobra y sacó a relucir su supuesto buen comportamiento en 2019, cuando, según él, respetó al máximo a los contendientes al título, que por aquel entonces eran el propio Bautista y Jonathan Rea.
Unas declaraciones que hicieron saltar al español: "Recuerdo en Laguna Seca cuando me golpeó y sufrí una lesión en el hombro, saltándome la superpole race y la carrera dos. También en Magny Cours me golpeó después de una pasada al límite", contraatacó Bautista, visiblemente molesto.
El español no se detuvo ahí y lanzó el dardo definitivo: "La palabra respeto, por tanto, en ese momento es fuerte, quizá tiene un problema de memoria. Habría que volver a ver las carreras para entender si había respeto, no lo hizo solo conmigo sino también con Johnny. Así que quizá 'respeto' no es el término más apropiado para definir aquel periodo".
El de Talavera de la Reina, que fue testigo de excepción de la acción que originó todo, le restó cualquier tipo de importancia: "Vi la maniobra, sí, Toprak pasó a Iannone frenando, y luego Iannone le cogió el interior de la curva. Lo he visto hacer mil veces. Es una maniobra que he hecho también yo y me la han hecho a mí", sentenció.
Más allá del cruce de declaraciones, el fin de semana portugués se saldó con un botín muy valioso para Bautista. Firmó tres terceros puestos que, si bien le dejaron lejos de la pelea por la victoria entre su compañero Nicolò Bulega y Razgatlioglu, resultaron fundamentales para que el equipo Aruba.it Racing se proclamara campeón del mundo por equipos. “Estoy feliz de haber subido al podio y también de haber contribuido a ganar el título de equipos con Aruba. Es el cuarto para mí”, declaró.
Consciente de su situación actual en la parrilla, el español asume con realismo su papel. "Este fin de semana era importante no cometer errores y tener puntos importantes en campeonato. El tercer puesto es el máximo que puedo obtener”, reconoció con sinceridad, dejando claro que su objetivo personal de aquí a final de temporada es asegurar la tercera plaza de la general.
Y de cara a la gran final en Jerez, con Bulega jugándose el todo por el todo, Bautista ha querido zanjar cualquier especulación sobre posibles órdenes de equipo o ayudas a su compañero de equipo.
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“No pienso que haya una familia Ducati, solo pilotos que corren para Ducati", afirmó, despejando cualquier duda sobre su estrategia en el trazado andaluz. “Nicolò tiene su objetivo de ganar el campeonato, yo el mío de ser tercero. No sé en qué modo podría ayudarlo a ganar el campeonato, no puedo porque la diferencia es grande. Se jugará el campeonato en el último fin de semana pero nadie puede ayudarlo”, concluyó Bautista.