.jpg) Javier OrtegaRedactor |
Marc Márquez ha dictado sentencia en el primer día de acción en el Circuito de Misano, estableciendo el mejor tiempo de la jornada con un 1:30.480. El piloto de Cervera, que se posiciona como el gran favorito para el fin de semana, ha sido también protagonista fuera de la pista al mostrar su descontento con un cambio introducido por Dorna durante los minutos previos a la carrera del domingo, inspirado en lo que ya sucede en la Fórmula 1.
La superioridad de Márquez en la sesión de tarde fue incontestable, relegando a sus más inmediatos perseguidores, los italianos Marco Bezzecchi y Franco Morbidelli, a más de una décima. Un recuperado Pecco Bagnaia, que busca dejar atrás su horrible GP de Catalunya, se aseguró el pase directo a la Q2 con el cuarto mejor registro del viernes.
Preguntado sobre si se siente el máximo aspirante a la victoria, Márquez abandonó su habitual prudencia para ser tajante. "De momento, sí. De momento y no lo puedo negar", afirmó el piloto. "Soy el primero que cuando me decís que voy de perfil bajo intento explicar la realidad y hoy éramos los que teníamos más ritmo en la pista", sentenció, si bien advirtió que espera que sus rivales "se irán acercando".
Este dominio vespertino contrasta radicalmente con sus sensaciones en la sesión matinal. El propio piloto reconoció haber vivido momentos complicados en el FP1. "He tenido que respirar debajo del casco, porque la sensación no era del todo buena. La moto estaba rebelde, muy agresiva", explicó Márquez, quien admitió que iba "peleándose" con su Ducati. Un "reset" mental y técnico fue necesario para revertir la situación.
El principal punto de fricción de la jornada surgió al conocerse que, a partir de este Gran Premio, MotoGP copiará el formato de parrilla de la Fórmula 1, donde los pilotos deberán permanecer de pie junto a sus motos durante el himno. Esta medida no ha sido bien recibida por Márquez, quien se enteró por la prensa. "No estaba al corriente, la verdad", declaró sorprendido.
Su reacción posterior fue una advertencia directa hacia Dorna por la elevada carga de trabajo y de compromisos que deben soportar los pilotos. "Cada vez nos piden más cosas, algún día explotaremos", advirtió. "Pero nosotros no decidimos este tipos de cosas", concluyó con un tono de resignación.
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Finalmente, el piloto de Ducati analizó la velocidad de los pilotos de la VR46 Academy en esta pista de Misano, atribuyendo el buen papel Bezzecchi, Morbidelli y Bagnaia al "efecto campo". "Aquí han salido todos los italianos con otra mentalidad. Tienes ese extra de confianza y arriesgas un poquito más", comentó en referencia ese empuje extra que proporciona correr en casa.
