 Por Alfonso Somoza @sukosomoza |
Caroline Olsen es un rostro muy conocido en su país natal, Noruega. A sus 35 años, ha sido una de las mujeres con mayor éxito en el mundo de las carreras, llegando a ganar el título nacional de Superstock 600 antes de cruzar el charco para probar suerte en MotoAmerica, donde gozó de una larga carrera deportiva en la categoría de Supersport.
Olsen compitió en Estados Unidos hasta el año 2019, una aventura que disfrutó junto a su marido Ole Bjorn, también piloto, y que con el tiempo ha ido compaginando con otras labores periodísticas e informativa, colaborando de forma asidua con el canal Viaplay Sport durante las retransmisiones del Mundial de Motociclismo en su país.
Ahora, Caroline está disputando otra carrera muy diferente: una lucha contra el cáncer. El pasado 22 de julio, Olsen hizo pública su enfermedad a través de las redes sociales, donde cuenta con miles de seguidores: "Hace exactamente tres semanas nos enteramos de que tenía cáncer de mama con diseminación a los ganglios linfáticos", arranca su comunicado.
"Un nódulo en mi pecho derecho que pensé que era una masa densa resultó ser un tumor grande. Hoy doné mi cabello y recibí mi primera dosis de quimioterapia. Ha pasado rápido y me siento bien por haber comenzado. Estamos preparados para que el próximo año sea duro, pero lo más importante es que me recuperaré por completo", dice con el ánumo por las nubes.
A punto de cumplir 36 años, Olsen ha tenido que apartarse del mundo de las carreras para centrarse en su recuperación, un duro camino en el que sus hijos Dennis y Mikkel, de 2 y 1 año de edad respectivamente, son quizás su mayor estímulo: "Se me cayó todo el pelo y así estará durante un tiempo. Admito sinceramente que fue un poco más duro de lo que pensaba. La diferencia entre tener el pelo de 3 mm y estar completamente calva se nota muchísimo. Afortunadamente, es solo temporal y el pelo vuelve a crecer; además, entramos en otoño con muchos sombreros, así que tampoco pasará nada. Como (mi hijo) Dennis señaló tan acertadamente: «Mamá, no tienes pelo»", dice en su cuenta de Instagram.
Olsen quiere aprovechar su notoriedad pública para mostrar todo el proceso de lucha contra el cáncer. Su objetivo es normalizar una desagradable situación por la que atraviesan miles de mujeres en todo el mundo: "Sigo siendo yo. Hablo abiertamente de mi enfermedad porque me resulta más fácil a mí y a los que me rodean hablar del cáncer. El cáncer sigue siendo una palabra que da miedo a mucha gente. ¿Quizás a través de la transparencia podamos hacer que dé un poco menos de miedo a aquellos que algún día pasarán por lo mismo?", se pregunta la piloto.
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Caroline mira ahora con optimismo hacia el futuro; sabe que le ganará el pulso a esta enfermedad y que tarde o temprano volverá a hacer vida normal, y quién sabe si volverá a desenfundar su mono de cuero para disfrutar de su gran pasión: correr en circuito y luchar por ganar.
