.jpg) Javier OrtegaRedactor |
Una parte de la afición que sigue con atención el Mundial de Motociclismo desconoce el pasado deportivo de Davide Tardozzi, el hombre que está al frente del box del Ducati Lenovo Team en MotoGP, la escudería formada por Marc Márquez y Pecco Bagnaia. El de Rávena fue uno de los pilotos que participaron en la primera edición del Mundial de Superbikes, allá por el año 1988, y aunque su paso por este paddock fue breve, el italiano supo dejar huella.
Tardozzi se apuntó al WorldSBK después de su infructuoso paso por el Mundial de 250 cc, donde no logró los resultados esperados. Su primera campaña en el mundial de motos derivadas de serie la completó a lomos de una Bimota, y su estreno fue sencillamente inmejorable, ganando la primera carrera en la historia del campeonato celebrada en Donington Park, hace ahora 37 años.
Echando la vista atrás, Tardozzi ha recordado lo especial y agridulce que fue aquel fin de semana: "Tengo recuerdos buenos y malos. Aquella carrera fue fantástica porque me encanta Donington. Al final gané la primera, pero todo se torció en la segunda porque me caí en la última vuelta. Por desgracia, por el reglamento, aquella ronda era combinada y salí de allí sin puntos. Eso significó que a final de temporada perdiera el campeonato", ha explicado el expiloto italiano en una charla con Worldsbk.com.
Tardozzi afirma estar "muy orgulloso de formar parte de aquellos orígenes porque me encanta WorldSBK", un campeonato que dice "llevar en el corazón" y en el cual supo dejar su impronta.
Este pasado fin de semana, el WorldSBK alcanzó un nuevo hito: la carrera número 1000 desde su inauguración, una fiesta a la que Tardozzi no pudo acudir: "Me habría encantado estar presente en la carrera 1000, para ver en vivo quién ganaba. Me gustaría que fuera un piloto de Ducati, pero, sea quien sea, lo valoro igual y con gusto le felicitaré por ello".
Los deseos de Tardozzi no se cumplieron; finalmente fue Toprak Razgatlioglu el que se apuntó el triunfo en esta carrera número 1000 al manillar de su BMW M1000RR, un éxito que el turco ya logró también en las carreras 800 y 900 del WorldSBK, dejando una huella imborrable antes de su inminente salto a MotoGP, donde competirá con una de las Yamaha del equipo PRAMAC.
Leer también: "Marc Márquez le faltó el respeto al motociclismo", critica un expiloto italiano mundialista
"Para mí es algo muy especial porque ya gané las carreras 800 y 900", dijo Toprak en Hungría tras ganar la Superpole Race, la cita que marcaba la carrera número 1.000 del WorldSBK. "Normalmente, no me pongo tan contento por ganar una Superpole Race, ¡pero esta sí! Estoy feliz por eso. Hemos trabajado muy duro y hemos vuelto a ganar. Ahora estoy pensando en la Carrera 2, ya que, si gano de nuevo, haré un triplete. Ese es mi objetivo", manifestó el turco, que finalmente logró su objetivo y remató el fin de semana de Hungría con triplete, el tercero consecutivo en lo que va de año.
