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El Mundial de MotoGP se prepara para el regreso de Jorge Martín este fin de semana en Qatar, y la expectación rodea también a su nuevo compañero en el box oficial de Aprilia, Marco Bezzecchi. El italiano ha hablado sin tapujos sobre cómo ha evolucionado su relación con el piloto español, marcada por antiguas rencillas pero ahora basada en la madurez y el reconocimiento mutuo, aunque todavía sin alcanzar la camaradería plena.
"Claro, no somos los mejores amigos, no me iría a cenar o a otro sitio con él, pero nos respetamos", aclara Bezzecchi en una entrevista reciente con Motogp.com. El #72 echa la vista atrás a sus inicios: "En el pasado, tuvimos momentos difíciles, especialmente de jóvenes. Al principio de Moto2 y Moto3, siempre tuvimos algunos problemas – a veces nos enfadábamos el uno con el otro – pero es normal". Sin embargo, subraya el cambio: "Ahora hemos madurado mucho, y afortunadamente nuestra relación ahora está bien".
Ese respeto actual se fundamenta en la admiración por el talento del rival: "Le respeto mucho porque es un piloto increíble, siempre muy rápido, muy fuerte, y creo que él hace lo mismo conmigo". Con Martín de vuelta, Bezzecchi mira al futuro con optimismo respecto a su convivencia: "Así que ahora nos sentimos bien, y esperemos que compartir box también esta temporada pueda mejorar nuestra relación día a día y quizá a final de año vayamos también a cenar”.
La ausencia del campeón reinante por lesión durante la pretemporada y las tres primeras carreras ("No tener a Jorge es difícil para nosotros", admite) puso a Bezzecchi en una situación inédita justo en su estreno como piloto de fábrica. "Fue un invierno extraño porque estaba solo en el box", relata el de Rimini. Describe la adaptación a ese rol protagonista inesperado: "Fue duro acostumbrarme a esta posición para mí porque era mi primera vez en un equipo de fábrica y, en mi caso, toda Aprilia Racing apuntaba a mis hombros, y la atención que tienes de todos los ingenieros es 10 veces mayor".
Bezzecchi reconoce la dualidad de esa responsabilidad: "Es genial porque desarrollas una moto de MotoGP, pero también tienes que tomar decisiones difíciles, así que el comportamiento de la moto también depende de lo que digas en tus comentarios”.
Con el equipo ya al completo, la ambición del italiano es máxima. Tras dejar la esfera de Ducati (VR46), quiere llevar a Aprilia a lo más alto. Analiza el panorama actual: "En este momento, el principal rival de Ducati es Ducati, porque tienen muchos pilotos y equipos".
Pero confía en el trabajo de la fábrica de Noale: "Estamos mejorando y somos siempre un poco más competitivos comparado con el pasado. Así que el objetivo es ser, en el futuro – lo antes posible – el principal rival no solo de Ducati sino de todos los fabricantes y de todos los pilotos”.
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Marca sus metas paso a paso: "Claro, me gustaría conseguir algunos buenos resultados lo antes posible, me encantaría conseguir un podio con mi nuevo equipo, mi nueva moto. Así que este es mi primer objetivo". Y no oculta su aspiración final, el gran sueño que le motiva cada día: "No competiría si no soñara con ser Campeón del Mundo de MotoGP, así que por supuesto espero que yo más Aprilia – podamos intentar luchar por el campeonato e intentar conseguir este sueño que ambos tenemos”.
