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El Monster Energy Yamaha MotoGP Team ha desvelado oficialmente sus colores para la temporada 2025 en un evento celebrado en Kuala Lumpur, donde Fabio Quartararo y Álex Rins mostraron la nueva YZR-M1, con una decoración que mantiene el negro característico del equipo, pero con un tono de azul más predominante.
El equipo de fábrica de Yamaha afronta esta temporada con la esperanza de volver a ser competitivo, después de un 2024 complicado en el que no logró ningún podio y finalizó en cuarta posición en la clasificación de constructores. Con la llegada de Massimo Bartolini como director técnico y un nuevo motor en desarrollo, la marca japonesa busca reducir la brecha con Ducati y Aprilia.
La presentación de la YZR-M1 2025 confirma que Yamaha sigue apostando por la combinación de negro y azul, pero con una mayor presencia de este último color en el carenado, destacando aún más la identidad de la marca. El logo de Monster Energy, patrocinador principal del equipo, sigue ocupando un lugar central en la moto, mientras que los detalles en verde característicos de la marca de bebidas energéticas contrastan con los tonos oscuros del diseño.
El cambio más evidente es el tono de azul más brillante, una decisión que refuerza la imagen de Yamaha en un año crucial para su recuperación.
Fabio Quartararo afronta su sexta temporada con Yamaha, equipo con el que se proclamó campeón del mundo en 2021. Aunque los últimos años han sido difíciles, el francés ha renovado su contrato por dos temporadas más, confiando en que la marca japonesa recupere su competitividad. “Llevo muchos años en Yamaha y estoy listo para este nuevo desafío”, declaró Quartararo durante la presentación. “Lo importante es centrarse en el presente, sin pensar demasiado en el futuro”.
El francés ha sido clave en la evolución de la M1, exigiendo mejoras en el motor y la aceleración, dos de los principales puntos débiles de la moto en comparación con sus rivales europeos.
Por su parte, Álex Rins encara su segundo año con Yamaha con la esperanza de poder luchar más arriba en la parrilla. En su primer año con la marca de los diapasones, el español tuvo que adaptarse a la M1 tras su paso por Honda, pero ahora, con una pretemporada completa, espera dar un paso adelante.
“Yamaha ha hecho un esfuerzo importante y nosotros estamos listos para seguir trabajando y ser competitivos”, aseguró Rins. “Aquí en Sepang hemos visto también a Dovizioso en acción, haciendo un trabajo muy importante en esta primera jornada de pruebas”. Rins confía en que las mejoras introducidas por Yamaha permitan a la M1 recuperar la tracción y la velocidad punta que tanto han echado en falta en los últimos años.
Más allá de los colores y los pilotos, 2025 será una temporada crucial para Yamaha. La marca ha estado desarrollando un nuevo motor V4, que podría debutar en algún momento del año, dejando atrás el tradicional cuatro en línea que ha caracterizado a la M1 desde su llegada a MotoGP.
Este cambio responde a la necesidad de igualar el rendimiento de Ducati, Aprilia y KTM, marcas que ya han demostrado que el V4 es la arquitectura más competitiva en la era moderna de la categoría. Además, Yamaha ha logrado recuperar un equipo satélite, Pramac Racing, lo que le permitirá contar con más motos en pista para acelerar el desarrollo de la M1.
Otro de los anuncios importantes durante la presentación fue la celebración del 70º aniversario de Yamaha, que tendrá lugar en julio de este año. La marca tiene preparadas varias actividades y eventos especiales para conmemorar su historia en el motociclismo.
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