 Redacción Síguenos en WhatsApp |
Rodar en Nürburgring, en el 'Infierno Verde' es lo más cercano a estar en el paraíso motero. Miles de coches y motos se dan cita mensualmente en las curvas del trazado germano de 20,85 kilómetros y 73 curvas a izquierda y derecha. Un auténtico carrusel de emociones encima de una moto.
Ahora bien, hablar de batir el récord en moto son palabras mayores. Tan mayores como que lleva sin romperse desde 2012. 12 años de inacción, de un récord irrompible encima de una moto que, encima, estaba para el arrastre.
Antes de saltar a la noticia de hoy, un poco de contexto. Fue Andy Carlile, un británico afincado en Alemania, quien rompió el récord en 2012. Como era empleado del circuito, tenía un pase y se conocía al dedillo el trazado. Compró una Yamaha R1 accidentada y la reparó y modificó a su gusto. Entonces es cuando decidió batir el récord, y lo consiguió: paró el crono en 7 minutos y 10 segundos. Y desde entonces, nadie lo ha mejorado.
Hasta hoy. Un youtuber ha grabado en primera persona el casi récord que ha estado a punto de completar, quedándose a tan solo 10 segundos del crono conseguido por Carlile en 2012. Y casualidades de la vida, también con una Yamaha R1, aunque en esta ocasión una prácticamente nueva.
Su nombre es 'Djiim_r1', y ha estado a punto de obrar el milagro. Su Yamaha R1 está modificada, pero no mucho. Como detalla en la descripción de su vídeo, ha mejorado la frenada Brembo, la moto rinde concretamente 194 CV y monta unos neumáticos Diablo Rosso Corsa IV. Listo para el 'time-attack'.
El motero se mete en un día de turisteo en Nürburgring, y eso significa que habrá tráfico, y no precisamente poco. Lidiar con los coches resta segundos, y al final lo acaba pagando: marcaría un tiempo final de 7 minutos y 19.9 segundos. Prácticamente 10 segundos de diferencia en comparación con el récord de Carlile. ¡Al palo!
Leer también: Razgatlioglu: "No sé qué le pasa a Álvaro, estoy esperando que regrese para luchar contra él"
De no haber sido por el tráfico, lo más seguro es que el hombre hubiese batido el récord. A pesar de ello, ha quedado una joya audiovisual digna de admiración, llevando la moto a casi 200 kilómetros por hora en ciertos ápices del 'Infierno Verde'. Dale al 'play' y disfruta:
