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 Por John Fernández @johnnyfumi |
Maverick Viñales ha hecho historia, para él mismo y para el mundo del motociclismo. Para él porque llevaba sin ganar desde la carrera inaugural de Qatar 2021 con Yamaha, y para el mundo del motociclismo porque ha sido el único piloto en ganar con tres marcas distintas: Suzuki, Yamaha y Aprilia. Hoy se ha desquitado de todo ello.
Para el sprint de hoy no era el favorito, ni mucho menos. Fue el claro tapado de la carrera; su salida fue buena, pero no mejor que la de Jack Miller o Pecco Bagnaia. Sin embargo, ahí estaba en la pomada. No tardó muchas vueltas en seguir presionando y ver cómo los demás decaían en ritmo y Bagnaia cometía su principal error, entregándole en bandeja el liderato de la carrera. Y ahí se adhirió hasta el final al carril del ganador, y efectivamente ganó ante un Marc Márquez y Jorge Martín que no pudieron con él.
Tras la carrera, Viñales ha admitido que “siempre salgo a tope”, pero que últimamente le es todo mucho más fácil gracias un “nuevo embrague que trabaja mucho más lineal y fácil”. Con él, comenta el de Aprilia, “el motor no decae de revoluciones, y por eso somos mucho más rápidos”. También explica que con él, “todas las salidas son iguales y eso nos da muchísima confianza”.
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Las buenas sensaciones del piloto de Roses a bordo de la RS-GP vuelven a coincidir con el final de temporada en Cheste: “Está siendo un fin de semana muy bueno porque dejamos una moto en Valencia con la que me encontraba genial y la tenía muy a mano, y en Portugal la estoy retomando”. Asimismo, explica cómo cuando “me siento bien y estoy en sintonía con la moto, puedo ir muy rápido, y eso es lo que nos interesa, tener este nivel”.
Ha tenido que reaccionar, y lo ha hecho bien, ante los ataques que le han proferido Marc Márquez o Pecco Bagnaia, de los que se ha defendido bien, dice, e incluso, “me he divertido mucho y me ha gustado porque era una batalla bastante psicológica, y me he sentido muy fuerte”.
El momento culmen ha sido cuando “he visto a Pecco irse largo y me he dicho ‘aprieta’, y lo he hecho. Curva a curva intentando hacerlo lo mejor posible. Esta victoria viene de mucho trabajo y del cambio del viernes en la moto; hay que tratar de estar atentos, sobre todo con el grip de la goma delantera y trasera, que es lo que nos pone en crisis”, revela.
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Por último, el español “agradece” a Aprilia “el trabajo”, y también “a los de casa”, comenta, “que saben lo que trabajo y lo que como para estar en este poco peso”. De esta carrera al sprint comenta que sale “con mucho hambre” y que “mañana va a ser una carrera difícil”. Situación similar vivió hace dos fines de semana su compañero de equipo Aleix Espargaró, capaz de apretar las tuercas a todos el sábado y venirse abajo el domingo.
