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A Álvaro Bautista le ha pasado de todo este fin de semana. El dos veces campeón del WorldSBK afrontaba la ronda inaugural del campeonato en Australia con muchas dudas, sobre todo después de una nefasta pretemporada en la que el dorsal #1 no pudo trabajar en su moto a causa de las lesiones en la espalda que arrastraba de su caída en Jerez del pasado mes de noviembre.
Al discreto estado de forma del español se sumaba, además, la incertidumbre de una pista como la de Phillip Island, donde las condiciones climatológicas cambian de un momento a otro, con el añadido de estrenar un nuevo asfalto que literalmente se comía los Pirelli de ambas categorías, lo que obligó a partir en dos todas las carreras largas del fin de semana.
Al final, la cosecha que se llevó Bautista de Australia no fue del todo mala; una caída en la Race 1 frustró la que podría haber sido una carrera decente para el español, que se mantuvo luchando en el top 5 durante los giros iniciales hasta que un toque con Sam Lowes le hizo perder varias posiciones, y en su intento por remontar, acabó en el suelo.
El domingo, 74 milésimas de segundo separaron a Álvaro del tercer peldaño del podio en la Superpole Race, un resultado sin duda esperanzador que permitió al talaverano afrontar la última carrera del fin de semana con la esperanza de, quizás, quedarse con alguno de los peldaños del cajón de honor.
Y lo consiguió, porque después de una Race 2 plagada de incidentes -caída de Jonathan Rea, bandera roja y finalmente carrera programad a solo 11 vueltas-, el de Ducati se llevó a casa un trabajado segundo puesto, a solo 48 milésima de haberle arrebatado la victoria a Alex Lowes.
Álvaro llegará a la próxima cita del campeonato clasificado en la quinta posición de la general, con una brecha de 23 puntos respecto a Lowes, primer líder del año. En Catalunya, una pista más europea y con un asfalto menos abrasivo que permitirá el desarrollo de un fin de semana normal, se verá el nivel real de la parrilla, y también servirá para comprobar si el lastre que Ducati ha tenido que añadir a la Panigale V4 R de Bautista realmente es tan perjudicial como podía parecer antes del arranque de la temporada.
En Australia, los de Borgo Panigale se negaron a dar el peso exacto del lastre que lleva la moto de Bautista; de hecho, el hermetismo sobre todo este asunto es tal que ni el propio Álvaro quiso revelar su peso actual después de un invierno en el que se ha machacado en el gimnasio como nunca para ganar músculo y algunos kilos extra, restando as lastre a su moto.
En Phillip Island, tras el pesaje oficial de los pilotos, el bicampeón de Superbikes evitó dar la cifra concreta de peso que había dado en la báscula: "He pesado más que el año pasado, más o menos, así que he ganado un poquito de músculo. No te puedo decir el peso porque es confidencial, peso menos que en la moto", comentó Álvaro sin ocultar una pícara sonrisa en el rostro.
"66 kilos pesaba el año pasado, 66 y medio o así. Y te he dicho que este año peso más, pero no te voy a decir cuánto. Os vais a quedar con la duda. Pero he pesado más", dejaba entrever un desenfadado Álvaro Bautista que este año es el único piloto obligado a llevar lastre tras la última actualización del reglamento.
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— WorldSBK (@WorldSBK) February 24, 2024
We tried to get @19Bautista to reveal his weight and this was the result 🤫#AustralianWorldSBK 🇦🇺 pic.twitter.com/sKchzXI6ET
Precisamente sobre esta normativa, el de Ducati comentó en Australia que "es una nueva norma del reglamento, yo entiendo que es para igualar el campeonato, y lo veo genial que quieran igualar el campeonato, para que haya más emoción, que ya la hay de por sí".
La nueva reglamentación introducida este año en el WorldSBK obliga a lastrar a aquellos pilotos que, con toda la equipación puesta, no lleguen a los 80 kilos. Si un piloto no alcanza esta cifra, deberá añadir el 50% del peso restante a su motocicleta; es decir, si el piloto pesa 75 kilos, su moto llevará 2,5 kilos de peso adicional por reglamento.
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Según los rumores que circularon por el paddock de Australia, la moto de Álvaro Bautista llevaba cinco kilos de lastre para las carreras de Phillip Island; es decir, el español estaría dando ahora mismo 70 kilos con la equipación puesta, cuatro kilos por encima de su peso hasta el año pasado.
