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 Por John Fernández @johnnyfumi |
Si el afortunado hoy era Jorge Martín por pasar a ser el líder del mundial, el damnificado era Pecco Bagnaia por haberlo perdido frente a una moto satélite. Después de la exuberante Sprint Race protagonizada por el del Prima Pramac, el español asciende al número uno con 328 puntos, robándole la primera plaza al italiano, que ya está a siete puntos de diferencia.
El bajón de rendimiento de Pecco Bagnaia se lleva acusando desde hace varias carreras; al contrario que Martín, que parece imbatible y no perdona ni un solo error. Las palabras de Pecco Bagnaia ayudan a entender que “la moto estaba nerviosa y hasta me costó abrir el gas. Son cosas que pueden pasar, pero en el momento que sales 13º todo se vuelve más difícil, a menos que vayas subiendo, pero yo no soy ese tipo de piloto. Al final el resultado es el que es”.
Hasta su compañero de equipo, Enea Bastianini, que había estado desaparecido con una Ducati oficial, estuvo por delante de Bagnaia (7º versus 8º). El vigente campeón del mundo mencionó que no quería adelantar a su compañero porque “la única solución era echarlo porque la trazada limpia aquí es muy estrecha. Sin embargo, no soy como algunos pilotos que tienden a hacer su propio camino, ya que no está en mi naturaleza”.
Sobre Martín, Bagnaia es consciente de que “está en el mejor momento de su historia y tenemos que ver cuánto tiempo puede mantenerlo”. La otra cara de la moneda es el equipo oficial, menciona: “Estamos en un momento de mayor dificultad. En India sabíamos lo que estaba pasando, mientras que aquí me falta algo en términos de rendimiento, y eso es lo más importante. Por tanto, mañana trabajaremos en ese extra. Necesitamos una carrera en la que podamos estar delante”.
El italiano revela que está “enfadado” y justifica que “no tenemos por qué estar en esta situación. Perder el liderato del mundial no estaba en el plan y por eso estoy más cabreado que frustrado. La carrera de mañana será muy difícil y diferente: quizá usemos el medio y tendremos que atacar y adelantar de inmediato”.
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La tendencia del campeonato en estas últimas carreras parece inequívoca, algo de lo que es consciente el piloto: “Yo hice cinco ceros mientras que Martín hizo dos. Al mismo tiempo, a diferencia de él, siempre he estado en el podio. Qué puedo decir: es difícil emitir un juicio porque en este momento está muy seguro de sí mismo y todo le resulta fácil. Después de Barcelona sufrimos un revés importante en una pista en la que luchábamos por ganar. Intentaremos trabajar para volver donde estábamos, conscientes de que quedan muchas carreras por delante”.
