 Redacción @todocircuitoweb |
Imola traerá cambios importantes en los techos de giro máximo que pueden alcanzar dos de los cinco fabricantes que compiten en el Mundial de Superbikes. Ducati y Kawasaki tendrán que trabajar este fin de semana en la electrónica de sus respectivas máquinas para ajustar la respuesta del motor a los nuevos márgenes impuestos por la FIM, cada uno hacia el lado contrario.
Ducati sufrirá su segundo recorte de revoluciones en lo que va de año; el primero se produjo en mayo, antes de la cita de Catalunya, momento en el que la organización del campeonato tiró de algoritmo para quitarle 250 rpm. al propulsor de la Panigale V4 R, que pasó de las 16.100 vueltas a las 15.850 rpm.
Sólo tres carreras después, y viendo que el dominio de Álvaro Bautista sigue siendo implacable -este ha ganado ya 16 de las 18 carreras que se han disputado-, la FIM volvía a meterle la tijera al motor de la Panigale a sólo unos días de arrancar la ronda de Imola, quitándole otras 250 vueltas más hasta bajar su límite a las 15.600 rpm., por debajo incluso del techo máximo de la moto de producción.
En Kawasaki, por el contrario, desembarcan en Imola con la posibilidad de hacer girar más arriba el motor de la Ninja; en Catalunya, los de Akashi ya usaron cinco de los puntos de concesión que tienen este año para ganar 250 rpm., y ahora que tienen una nueva ventana para repetirlo, Kawasaki ha vuelto a desprenderse de otros cinco puntos más -que bien podrían usar en otras áreas como el chasis- para darle más vida a su motor y cifrar ahora su límite en 15.100 rpm.
Con esta última actualización, Kawasaki está cada vez más cerca de las revoluciones que tenía el motor de la Ninja de Jonathan Rea cuando el norirlandés gobernaba el campeonato con puño de hierro; en 2018, la FIM decidió quitarle a los de Akashi 1.400 rpm. de golpe, pasando en ese momento de las 15.500 vueltas que tenía la Ninja ZX-10R a las 14.100 rpm.
En aquella época no existía un algoritmo de equilibrio ni puntos de concesión: la organización decidió, de forma unilateral, pararle los pies a Rea bajándole en aquel momento el techo máximo de giro de su moto, una limitación que no impidió al de Larne ganar también los títulos de 2019 y 2020.
Ante este nuevo panorama, Álvaro Bautista ha tirado de ironía para mostrar su descontento con la decisión adoptada por la FIM; en un vídeo compartido por el propio campeón de Superbikes en sus redes sociales, el talaverano responde a este último tijeretazo de revoluciones quitándole el carenado frontal a su Panigale V4 R para colocárselo a una de las Panigale V2 bicilíndricas del equipo Aruba.it, la moto con la que Ducati compite en el Mundial de Supersport.
"Como sabéis, para la carrera de Imola y lo que queda de campeonato nos han reducido más las revoluciones, así que vamos a ello", dice el español antes de retirar el carenado frontal de su V4 R para ponérselo a la Panigale V2. "Pues ya estaría, tenemos la moto para correr en Imola, ¿vale?", dice Bautista con ironía.
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Puedes ver el vídeo a continuación:
Bike ready for #ITAWorldSBK pic.twitter.com/YUFJNkvK5A
— Alvaro Bautista Arce (@19Bautista) July 13, 2023
