 Redacción @todocircuitoweb |
Si el año pasado Enea Bastianini puso en jaque a Pecco Bagnaia al manillar de la Ducati satélite del equipo Gresini, este curso es otro piloto de la órbita ducatista, Marco Bezzecchi, el que le está poniendo las cosas difíciles al vigente campeón del mundo de MotoGP.
Tras haber completado los cinco primeros grandes premios del curso 2023, Bagnaia mantiene un frágil liderato con sólo un punto de ventaja sobre Bezzecchi, sin duda el piloto revelación de la temporada. El miembro del Mooney VR46 Team no sólo está exhibiendo una regularidad apabullante puntuando en nueve de las diez carreras disputadas hasta el día de hoy; además, 'Bezz' ha ganado este año dos carreras dominicales, ha subido al podio en otra más y también ha logrado un top 2 en una Sprint Race.
Las comparaciones con el curso pasado -cuando sólo sumó ocho puntos en los cinco primeros grandes premios de 2022- son odiosas, y demuestran lo mucho que ha crecido el piloto de Rimini en sólo un año. Parte del éxito de Marco se debe también a la moto que lleva entre las piernas, la Desmosedici GP22 con la que Pecco Bagnaia ganó el título en 2022, un prototipo que sigue siendo altamente competitivo no sólo contra las demás motos de la parrilla, también frente a la más avanzada y mejorada GP23 que llevan los pilotos del Ducati Lenovo Team y del PRAMAC Racing.
Uccio Salucci, máximo responsable de la escudería de Valentino Rossi en la categoría reina, cree que los resultados cosechados hasta ahora por Bezzecchi demuestran que "tenemos un paquete técnico que funciona muy bien gracias a Gigi y a Ducati", y aunque señala que "son las motos del año pasado", opina que "están super probadas y a nuestros pilotos lees gustan mucho, además Gigi siempre nos da algo. En Mugello tendremos un paquete técnico actualizado" recoge GPone.com.
Los cambios de reglamento que ha ido sufriendo el campeonato a lo largo de los últimos años han permitido que hoy los equipos satélite puedan luchar de tú a tú con los oficiales; Uccio piensa que "después de cinco carreras, estamos demostrando que un equipo satélite puede estar ahí luchando por el campeonato", y confía en que, con el paso de las semanas, no crezca la brecha con las motos oficiales a medida que sus pilotos reciban mejoras: "Es cierto que de aquí a final de año los pilotos oficiales irán creciendo y nosotros no. Pero habrá que ver hasta dónde crecen, porque en el MotoGP actual todo es muy extremo".
Siguiendo con Bezzecchi, Uccio afirma "no estar preocupado" ante la posibilidad de perder a su mejor piloto el año que viene. Confía en que Ducati le mantenga en las filas del Mooney VR46 Team al menos un año más, y pide a los Borgo Panigale "su apoyo para seguir contando con él", sobre todo ahora que ha demostrado ser un piloto ganador y con capacidad para liderar el campeonato.
"Nuestro equipo trabaja para que nuestros pilotos suban al equipo oficial, para eso nació este proyecto. No sería justo que nos quedáramos con Bezzecchi para toda su carrera deportiva, pero nosotros no trabajamos para otros equipos satélite. Si Ducati quisiera ponerlo en el PRAMAC, la idea no me entusiasmaría", admite Uccio, convencido de que Ducati debe arropar un poco más a su piloto.
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"Ahora Marco tiene un sueldo y un paquete técnico en consonancia con un equipo satélite, y no es justo que siga así. Ya he hablado dos veces con Dall'Igna, le he dicho que me gustaría que siguiera en el VR46 Team con una moto de fábrica y un contrato directo con Ducati. Yo aquí doy un paso atrás y será Ginaluca Falcioni, su mánager, el que se encargará de las negociaciones. Pero yo estoy tranquilo, me daría mucha pena perder a Marco", concluye un Uccio Salucci que está feliz y encantado con el rendimiento que este año están exhibiendo tanto Bezzecchi como su compañero de filas, Luca Marini.
