 Redacción @todocircuitoweb |
Las carreras de motos no podrían llevarse a cabo sin la presencia de una figura clave en todos los circuitos: los comisarios. Su función principal es informar a los pilotos mediante banderas de diferentes colores sobre el estado del trazado, las condiciones meteorológicas, las sanciones o las situaciones de peligro.
Los comisarios también son los primeros que acuden a ayudar a un piloto cuando sufre una caída o un fallo mecánico. En cuanto divisan un accidente, acuden para comprobar el estado físico del piloto y ayudarle a levantar o desplazar la moto o el coche, para así retirarlo de la escapatoria y evitar, además, la colisión de otro piloto.
Normalmente, para ser comisario de pista hay que tener una licencia expedida por la federación autonómica de automovilismo o motociclismo, y recibir una formación específica sobre la reglamentación y el protocolo de actuación. Los comisarios trabajan en equipo y bajo la supervisión de la dirección de carrera, que es la máxima autoridad durante el evento.
Ser comisario de pista es una forma de vivir las carreras desde dentro, con pasión y responsabilidad. Son imprescindibles para que el espectáculo del motor sea posible y seguro; la mayoría son voluntarios que no guardan relación profesional con el mundo del motorsport, dedicando su tiempo de forma casi altruista -la compensación económica que reciben es siempre escasa- por pura devoción a las carreras.
Cuando un comisario abandona el vial para ayudar a un piloto caída, debe estar siempre alerta; su máxima para evitar ser arrollados por otro participante es relativamente sencilla: no apartar jamás la mirada de la pista y nunca andar de espaldas a lo que sucede detrás. De ese modo, si otra moto o coche pierde el control y sale a la escapatoria, tendrán tiempo de reacción.
Hace unos días, con motivo de la ronda de Brands Hatch del campeonato nacional británico NG Road Racing Championship, fuimos testigos de una imagen que nos dejó la sangre helada; durante el transcurso de una de las carreras, el estado de la pista provocó una serie de caídas en la última curva del trazado británico, y los dos comisarios ubicados en ese punto no tardaron en reaccionar.
Tal y como se puede apreciar en el vídeo, primero hay dos pilotos que se caen prácticamente a la vez, y cuando los dos comisarios van a atender al primero de ellos, un tercer participante de la carrera sale recto en ese mismo punto y está a punto de llevarse por delante a uno de los marshalls, que en ese momento estaba cometiendo el error de no atender a lo que estaba sucediendo en pista.
El comisario cae el suelo aquejado de dolor en una pierna, aunque según los comentarios del vídeo escritos por algunos aficionados presentes ese día, todo quedó en un susto y un golpe en un tobillo que no revistió de mayor gravedad.
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Puedes ver el vídeo de lo ocurrido a continuación:
