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Enea Bastianini se ha quitado la espinita que le dejó la última cita de Misano, cuando el piloto del Gresini Racing fue incapaz de adelantar a Pecco Bagnaia en la última vuelta del Gran Premio de San Marino. Hoy, en Aragón, el piloto de Rimini se ha vuelto a medir en pista contra el que será su compañero de equipo en 2023, y esta vez sí que ha sido capaz de encontrar un hueco para meterle su Desmosedici y firmar su cuarta victoria de la temporada.
Con su victoria en Alcañiz, Enea ha demostrado que en Ducati no existen órdenes de equipo para ayudar a Pecco a proclamarse campeón del mundo de MotoGP, y ahora que 'La Bestia' ya cuenta con 163 puntos en su casillero, 48 menos que el líder Fabio Quartararo, el italiano todavía sueña con llegar a Valencia con opciones matemáticas de proclamarse campeón del mundo.
El piloto italiano ha sido uno de los protagonistas de la rueda de prensa oficial posterior a la carrera del Gran Premio de Aragón, donde ha resumido su excelente domingo en Alcañiz.
Batalla intensa pero limpia con Bagnaia: "La batalla con Pecco ha sido bonita, como la de Misano. Hoy no hice una buena salida, Aleix me adelantó y perdí varias posiciones. En la novena vuelta volví a ponerme delante y pude pasar a Pecco, pero luego cometí un error en la curva 10 y eché por tierra todo lo que había hecho. En ese momento me di cuenta de que tenía que recuperar la concentración y seguir con la carrera. Pecco tenía un ritmo excelente y sus trazadas eran perfectas, como en Misano. No ha sido fácil la verdad, pero en la última vuelta conseguí pasarle y ganar. Es una gran sensación volver a lo más alto del podio".
El adelantamiento en la curva siete surgió de repente: "No lo tenía planeado, iba detrás de Pecco y me acerqué mucho a él en la curva cinco. Ahí me di cuenta de que quizás podría encontrar algún hueco para pasarle. Es un sector en el que yo tenía algo de ventaja, y lo supe explotar. Pero fue un adelantamiento limpio, ambos tuvimos cuidado de no cometer errores".
En Ducati no hay órdenes de equipo, y hoy lo ha demostrado: "En Misano cometí un error en la curva cuatro, aquí lo he dado todo otra vez y he podido pasar a Pecco en la última vuelta. Espero haber podido despejar todas las dudas...".
No es nada fácil ganarle a Bagnaia con una moto prácticamente idéntica: "Nuestras motos son muy parecidas, por eso creo que los estilos de pilotaje marcan una gran diferencia. Las curvas son uno de mis puntos fuertes, pero Pecco sabe conservar mejor el ritmo. Ambos frenamos muy fuerte y este circuito tiene muchas zonas complicadas sobre se pueden hacer distintas trazadas y es fácil equivocarse, así que mantener la concentración ha sido algo fundamental".
No supo del accidente de Fabio Quartararo hasta el final: "Me enteré de la caída de Fabio al final de la carrera. Quiero ser realista y tampoco voy a perder la cabeza, recuperar 48 puntos a estas alturas del campeonato no sería nada fácil. Prefiero afrontar las próximas citas carrera a carrera, seguiré dando lo mejor de mí".
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Prefiere no pensar en el título: "Yo sólo voy a pensar en hacer mis carreras y darlo todo, como siempre. Ni que decir tiene que intentaré no correr riesgos. En cuanto al título, Pecco está en un estado de forma excelente, pero Fabio está haciendo algo increíble con la Yamaha a pesar de que no llegará a Japón en su mejor estado de forma. Aleix es un signo de interrogación, va un poco más tapado, pero es constante en sus resultados".