Foto: Motogp.com
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El Gran Premio de Gran Bretaña ha sido la confirmación de que en equipos como KTM tienen que trabajar duro en clasificación si quieren estar luchando por las posiciones de cabeza durante la carrera. La firma austriaca ha dado un paso al frente, pero todavía tiene mucho trabajo por delante, con Miguel Oliveira como mejor clasificado en la sexta posición en Gran Bretaña a menos de tres segundos de Pecco Bagnaia.
El piloto portugués tiene claro en que áreas tienen que trabajar en KTM, pero prefiere hacer lectura positiva de un fin de semana de mucho aprendizaje durante la vuelta a la competición. Ahora, Oliveira sigue mentalizado en continuar desarrollando la RC-16 para lograr los mejores resultados posibles hasta final de temporada, momento en el que abandonará la disciplina austriaca.
Al finalizar la carrera en Silverstone, Miguel Oliveira reconocía haber dado lo máximo tras sus problemas en clasificación, y espera que se pueda solucionar en las próximas citas: “Ha sido una buena carrera, hemos tenido un buen fin de semana en general. Como sospechábamos ayer, estas eran las posiciones por las que podíamos luchar. Justo antes del final estaba convencido de que podríamos haberlo hecho mejor si no hubiera salido 3º en la parrilla. Nuestras sesiones de clasificación siguen siendo un factor que afecta mucho a nuestros resultados. Estoy contento con el sexto puesto, es un buen comienzo para la segunda mitad de la temporada. Espero que obtengamos algunos resultados más como este”.
El piloto del Red Bull KTM Factory Racing acertó montando el neumático duro trasero a pesar de que no tenía prácticamente información sobre él al no haberlo probado a fondo el viernes y el sábado: “Creo que la clave del éxito fue que probamos el neumático trasero duro en el warm-up. Hasta entonces todavía teníamos dudas sobre la elección de los neumáticos. Sabíamos que este compuesto funcionaba bien para nosotros, pero estaba demasiado frío cuando girábamos a la izquierda. Por eso no lo tuvimos en cuenta en los entrenamientos, pero mi equipo con mi jefe de mecánicos Paul Trevathan, hizo un gran trabajo".
Miguel tuvo la última palabra en la parrilla de salida sobre qué neumático escoger, si el medio o el duro, y no falló: "Me dieron toda la información y luego me dejaron la decisión a mí. Dije: 'No tengo nada que perder, así que pondré el compuesto duro'. La mayoría de las Ducati también han corrido con él. Pensamos que si tuviéramos un estilo de conducción similar, esta elección de neumáticos podría funcionar bien. Y mis buenos tiempos en las últimas vueltas fueron el resultado de esa decisión. Estoy feliz, sí".
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Por último, el luso ha comentado que está sorprendido por las cualidades que está mostrando la RS-GP, una moto muy competitiva que podría acabar en sus manos en 2023 si finalmente se hace efectivo su traspaso al nuevo equipo satélite que los de Noale desplegarán el próximo año: " La Aprilia tiene buen giro, eso seguro. Y tiene una gran velocidad. Sin embargo, en condiciones de carrera, las diferencias entre las motos son más ajustadas que en una sola vuelta. Hay muchas motos con un ritmo muy similar. La Aprilia parece una moto impecable, quizás un poco más estable que la Ducati", concluía Oliveira, que tuvo la oportunidad de luchar con Aleix Espargaró varias vueltas.