
El mundo del motociclismo ha perdido a uno de esos genios que, muchas veces, pasan desapercibidos para el resto de los mortales. Estamos hablando de Sam Matthews, un inglés amante del diseño y la ingeniería que trabajó durante muchos años como pupilo del gran maestro Tamburini.
Matthews falleció ayer en un hospital francés al no poder recuperarse de las graves lesiones sufridas tras caerse de su Aprilia RSV4 en el Circuito de Magny-Cours, en el transcurso de una carrera del campeonato galo European Bikes el pasado 1 de julio. El británico se vio envuelto en una caída múltiple con otros tres pilotos, con la mala fortuna de ser golpeado por una de las motos, causándole una perforación de riñón, fracturas múltiples y diversas lesiones cervicales.
Sam Matthews residía actualmente en París junto a su esposa y sus dos hijos pequeños, y ejercía su profesión de ingeniero de diseño en la fábrica francesa de automoción Citröen. Durante varios años vivió en San Marino y trabajó en el Centro Ricerche Cagiva de MV Agusta, trabajando codo con codo junto a Massimo Tamburini y colaborando en el diseño de motos tan carismáticas como la F4. Más tarde se marchó a Ducati para trabajar con Pierre Terblanche, con el que mantuvo una gran relación profesional.
Uno de sus últimos proyectos de diseño relacionados con el mundo de las dos ruedas es el de la Vyrus 985, una moto que le cautivó desde el momento en el que Ascanio Rodorigo, fundador de la compañía, le mostró los primeros bocetos. "Trabajamos a distancia, Sam -que ya estaba en París- hacía los dibujos en CAD y yo los tenía que interpretar a la hora de realizar un modelo a escala real, entonces le hacía fotos y se las enviaba por email para que viese el resultado", explicaba Rodorigo durante una entrevista concedida a Alan Cathcart para Motorcyclistonline.com.
La colaboración entre Matthews y Ascanio continuó con la Vyrus 986 M2, una evolución del modelo anterior equipada con un motor de cuatro cilindros y 599 cc -en lugar del Testastretta de la Ducati 999 que monta la 985- que permite a esta Vyrus participar en cualquier carrera de la categoría de Moto2. Una moto que Sam pudo probar el pasado mes de febrero en el Circuito de Cartagena junto a su gran amigo Rodorigo (ver fotos más abajo).
La fatalidad ha querido que nos quedemos sin un genio del diseño, al que muchos recordaremos cuando veamos alguno de los modelos en los que quiso dejar su impronta. Desde Todocircuito.com queremos mandarle un fuerte abrazo a su mujer Elodie, sus hijos Michael y Lou, y a toda la familia y amigos que Matthews tenía repartidos por todo el mundo, que nos consta que son muchos.
Gracias a Jose Manuel (Jalapeños Racing Team) por hacernos llegar la noticia y las fotos de Sam en Cartagena.