 Por John Fernández @fernanduzo |
La buena racha de Aleix Espargaró no se detuvo en el último Gran Premio de Jerez del Mundial de MotoGP. Se pudo hacer con la tercera posición en carrera, lo que le sirvió para sumar más puntos y ponerse segundo en la general, a tan solo 7 de Quartararo, quien lidera a día de hoy. Esa subida al cajón del podio supuso una diferencia importante a partir de ahora para Aprilia: la pérdida de concesiones.
Lo que a priori se podría ver como una falta de ventajas respecto a la competencia, el propio Espargaró no lo afronta como un problema, ni mucho menos. Al término del GP de España, en la rueda de prensa posterior a la carrera, el piloto español se mostró favorable ante la situación que afrontarán a partir de ahora sin ninguna ventaja respecto al resto de fábricas de la parrilla. De hecho, será la última marca en beneficiarse de este programa, pues el año que viene no habrá ninguna moto con concesiones.
¿Los más damnificados? Los ingenieros de Aprilia, pero no demasiado: "Creo que, si estamos en la sexta carrera y estamos a siete puntos del liderato, es porque la moto está funcionando bien. Así que es justo para luchar con ellos con las mismas armas. Sé que al principio los ingenieros de Aprilia estarán un poco más estresados, pero no creo que cambie mucho. Mi vida será un poco más fácil. Tendré más tiempo en casa, tendré más tiempo para ir en bicicleta. Creo que no nos afectará realmente, lo más difícil fue alcanzar el nivel que alcanzamos así que ahora el motor tendrá que durar un poco más. Pero creo que lo harán".
Consciente de su ritmo, dice que tiene un problema en el embrague a la hora de los adelantamientos: "En realidad, mi ritmo en Jerez demostró que es más fuerte que el de Jack y Marc, pero no pude adelantarlos. Sé que tuve que estar muy cerca toda la carrera, cada vez que abrían la puerta, ponía mi rueda detrás para hacer presión. Y sabía perfectamente que, en 40 minutos, por lo menos uno o dos errores llegarían. Pero tenemos que mejorar el embrague porque es mi mayor problema este año. En Jerez no fui capaz de adelantar. En las carreras no se trata solo de ser rápido, también tienes que ser bueno adelantando. Y en Jerez no lo he sido. Era más rápido que ellos, pero esto es una carrera, no estás corriendo solo y tienes que adelantar".
Se ve con posibilidades de luchar por Quartararo por el Mundial: "Sí, soy un contrincante al título. Fabio fue el campeón del año pasado. Él está liderando, siendo constante... Estamos a sólo siete puntos de distancia. Así que creo que este tren acaba de pasar una vez, especialmente en mi caso. Así que trataré de subirme. Sé que va a ser duro, difícil. Todavía tenemos que mejorar la moto y yo también. Pero la consistencia será la clave. Y de momento mi reto ha ido bastante bien. Así que estoy muy contento y lo haré. Sí, intentaré presionar a Fabio hasta el final".
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El piloto español revela otro problema más en la RS-GP, el chattering: "Estaba siguiéndoles (a Márquez y Miller) y yo tenía mucho chattering, demasiado en las curvas de izquierdas. No podía tomar curvas con velocidad. Fue difícil gestionar la situación. Muy, muy difícil. Y en cuanto me he acercado a ellos, he sido el segundo más rápido y no he tenido ningún problema. Sabemos que íbamos al límite. Sabes que cuando estás siguiendo a una moto y te sigue otra, toda la presión incrementa y es muy difícil. Si tuviese una mejor salida de curva, tal vez podría tratar de seguir a Pecco y Fabio".
