 Por John Fernández @fernanduzo |
El Mundial de Superbikes no es rentable para Jerez: pierden 700.000 euros por carrera. Así lo ha afirmado la vicepresidenta de Cirjesa, Laura Álvarez. Ya se hizo oficial que el WSBK no correrá la ya mítica ronda en el Circuito de Jerez al no renovarse el contrato entre las dos partes, ya que a los 700.000 euros de pérdidas se le suma la mala situación económica de Cirjesa provocada por las pérdidas del coronavirus y la falta de apoyo de administraciones públicas.
De hecho, todos los consejeros votaron luz verde al plan de viabilidad económica del Circuito de Jerez, ya que el "el Ayuntamiento de Jerez no puede afrontar los gastos en solitario", según ha dicho la propia Álvarez. Ella misma ha reconocido que, acabada la vinculación legal por contrato entre el Circuito de Jerez y el Mundial de Superbikes, no se podían permitir otro año de pérdidas: "No teníamos esa obligación y lo cierto es que esta prueba nos producía un desequilibrio de 700.000 euros a las cuentas porque es inviable económicamente, los gastos son importantísimos y la recaudación de las entradas es mínima".
Desde el Circuito se comprometieron a llevar a cabo la prueba única y exclusivamente si el resto de las administraciones públicas participaban económicamente en los gastos y el coste de la carrera. Según la edil socialista, ni la Junta de Andalucía, ni la Diputación, ni ningún patrocinio privado ni el Ayuntamiento han querido aportar económicamente para mantener la carrera de Superbikes. "Al fin y al cabo, somos una empresa pública que da resultados a final del año y en el plan de viabilidad que aprobaron todos los consejeros la prueba estaba condicionada a la cofinanciación y al reequilibrio económico", dijo al respecto.
Siendo así la situación económica del Circuito, sólo se pueden permitir pruebas que les reporten algún tipo de beneficio económico, y no pérdidas tan grandes como las del WSBK. Si bien esta financiación no está solo sujeta a la entrada de ventas al público, entran en juego patrocinios privados y apoyos de las administraciones públicas, que han de votar de un consejo reunido para la ocasión, y, que en este caso, no ha sido posible de llevar adelante
No será por falta de interés, ya que hasta el último instante han intentado conseguir patrocinadores privados, así como el apoyo de las administraciones. Pero "de un año para otro cubrir los gastos que generan las Superbikes es muy complicado". A pesar de ello, no se descarta que en los próximos años se pueda retomar la prueba, aunque casi todo dependa del apoyo de la Junta de Andalucía.
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"Es una prueba que atrae afición, pero no mueve lo que mueve MotoGP. Sólo hay que mirar lo que aporta la Comunidad Valenciana a su circuito y lo que aporta la Diputación Valenciana a la Cuna de Campeones. Es que no tenemos parangón, es una situación insostenible", sentenció al respecto en una rueda de prensa.
