 Redacción @todocircuitoweb |
Honda parece estar dispuesta a llevar a cabo una revolución total en su proyecto del Mundial de Superbikes con vistas a 2022. La estructura oficial de HRC no sólo ha renovado por completo a su pareja de pilotos dando entrada a Iker Lecuona y Xavi Vierge: la marca del ala dorada también parece tener la firme intención de cambiar de suministrador de suspensiones y frenos con el objetivo de dar ese pasito adelante y cerrar la brecha que les separa de las mejores fábricas del WorldSBK.
Durante el último test privado celebrado en el Circuito de Jerez Ángel Nieto, la estructura dirigida por Leon Camier puso en pista las mismas motos con las que Álvaro Bautista y Leon Haslam habían cerrado la temporada en Indonesia un mes antes, aunque con dos cambios destacados.
El primero: las suspensiones, y es que HRC desmontó la horquilla y el amortiguador trasero Öhlins empleados este año y estuvo probando material proporcionado por Showa, que también desplazó a uno de sus técnicos de suspensiones hasta Jerez para trabajar estrechamente con Honda y entender las diferencias de funcionamiento respecto a las suspensiones de la marca sueca.
Pese a que Öhlins es la marca elegida por la mayoría de equipos del WorldSBK, no hay que olvidar que el Kawasaki Racing Team -ganador de todos los títulos que se han disputado entre 2015 y 2020 junto a Jonathan Rea- ha confiado siempre en Showa, de modo que la marca japonesa especialista en suspensiones sabe perfectamente lo que se necesita en este paddock para llevar a un equipo a lo más alto.
Además de las suspensiones, Honda también parece estar dispuesta a hacer otro cambio destacado en su Fireblade en el apartado de la frenada. Después de dos años junto a Brembo, el equipo oficial HRC también estuvo haciendo comparaciones en Jerez con otro proveedor, Nissin, una marca en la que Honda cuenta con una participación del 34% en su accionariado y que equipa a muchos de los modelos que la marca del ala dorada vende en todo el mundo.
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En el caso de que HRC apueste definitivamente por Nissin, el fabricante con sede en Nagano se convertiría en el suministrador de dos equipos oficiales del WorldSBK tras haber estado trabajando estrechamente con el BMW Motorrad Team desde el año 2019, cuando la marca alemana decidió regresar al paddock de Superbikes con un equipo factory propio y confiando en Nissin para frenar su S1000RR.
