 Redacción @todocircuitoweb |
Lin Jarvis es plenamente consciente de que su tiempo en MotoGP está llegando a su fin. A sus 64 años, el directivo británico ya empieza a estar cansado de viajar por todo el mundo y de tener que lidiar con ciertos problemas dentro de su fábrica, y aunque admite que sigue estando enamorado de su trabajo, sabe que tarde o temprano tendrá que ceder el relevo al frente de Yamaha Racing en MotoGP.
Jarvis ha sido el rostro visible de la fábrica de Iwata en el Mundial de Motociclismo desde hace dos décadas. El británico ha vivido los mejores años de su fábrica en la categoría reina: desde la llegada de Valentino Rossi en 2004 tras una negociación muy complicada a espaldas de Honda, hasta la difícil convivencia que el italiano mantuvo con Jorge Lorenzo en el box del equipo oficial Yamaha de 2008 en adelante, sin olvidar estos cinco últimos años en los que la marca de los diapasones ha sufrido más de lo esperado en MotoGP, una mala racha que Fabio Quartararo se ha encargado de finiquitar.
Hablando para Motorsport-total.com, Jarvis reconoce "estar cansado" después de mantener el rumbo del barco de Yamaha en un océano tan agitado como es el de MotoGP, especialmente ahora que siguen manteniendo el mismo ritmo de viajes y desplazamientos con todos los inconvenientes que acarrean las restricciones motivadas por el coronavirus: "Estoy cansado. La pandemia de COVID-19 nos ha causado más trabajo, y al mismo tiempo se ha perdido parte de la diversión. Ya no podemos ir a restaurantes, hay muchas restricciones y tampoco podemos traer invitados".
Si la pandemia ya complicó el trabajó y la organización de las fábricas implicadas en MotoGP, Lin Jarvis ha tenido que lidiar con dos inesperados problemas en cuestión de un año que casi colman su paciencia como máximo responsable de Yamaha en el campeonato: "El problema con las válvulas fue realmente agotador. Este último año también tuve que lidiar con el caso de Maverick. El título de Fabio ha sido, en cierto modo, una recompensa a tanto esfuerzo".
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No obstante, Jarvis lanza un mensaje tranquilizador para todos los que trabajan con él y deja claro que, a corto plazo, seguirá liderando el proyecto de Yamaha en MotoGP con la esperanza de seguir añadiendo más títulos a los ya conseguidos junto a Valentino Rossi (4), Jorge Lorenzo (3) y Fabio Quartararo (1). Para el británico, dejar su silla con diez entorchados sería la mejor despedida posible: "Todavía estoy motivado para hacer mi trabajo, pero aquí los resultados son cruciales. Tengo 64 años, creo que me quedan tres o cuatro años. Mi objetivo es conseguir diez títulos, me gustaría celebrar dos más y después dejarlo", concluye Jarvis.
