 Redacción @todocircuitoweb |
Óscar Haro se tomará un descanso a final de temporada. El director deportivo del Team LCR Honda no seguirá en el paddock de MotoGP en 2022 para dedicarle tiempo a su familia y a otros proyectos en los que lleva años trabajando, entre ellos el Revival Café Madrid, un restaurante que se ha convertido en muy poco tiempo en el templo del motor de la capital del país.
Tras desembarcar en el mundial en el año 1988 como chico de los recados y lavando motos en un equipo de 125 cc, Haro ha ido progresando dentro del Continental Circus a lo largo de estos últimos 32 años. En estas tres décadas, el madrileño ha sido mecánico, jefe técnico, team manager, llegó incluso a fundar su propia estructura hasta que, en el año 2006, Lucio Cecchinello le contrató como director deportivo del LCR Honda Team en el primer año de vida del equipo con Casey Stoner en el box.
Para Haro, Cecchinello ha sido como un segundo hermano mayor. Su relación arrancó en el año 2000 cuando Lucio todavía competía en el mundial y Óscar llegó a su equipo como mecánico. Un lustro después, ya con Cecchinello retirado y el LCR Team dando el salto a MotoGP, Haro ha sido el responsable de gestionar toda la parte deportiva del equipo, siempre con una sonrisa en la cara.
Óscar también es conocido en el paddock del mundial por su implicación a la hora de poner en marcha todo tipo de proyectos solidarios para ayudar a aquellos que más lo necesitan. Su mayor éxito lo consiguió en el año 2014 recaudando más de 250.000 euros para la lucha contra el cáncer a través de la subasta de un casco solidario pintado de rosa que fue firmado por todas las estrellas del campeonato. Sin ir más lejos, este próximo fin de semana, Óscar aprovechará que no hay carrera de MotoGP para asistir a un evento en Elche en beneficio de la ONG Infancia Sin Fronteras organizando una comida benéfica por Halloween.
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Después de haberle dedicado tres décadas de su vida al Mundial de Motociclismo, Óscar Haro necesita una pausa para disfrutar de su mujer y su hija, dedicarle más tiempo al Revival Café Madrid (si no lo conoces, ya estás tardando en acercarte un día) y recuperarse de un 2020 muy duro en lo personal para el madrileño tras el fallecimiento de su padre como consecuencia de la pandemia de Coronavirus.
De todos modos, conociendo el carácter de Haro, estamos convencidos de que se dejará ver en más de una ocasión por el pitlane para comprobar que toda la familia del LCR Honda Team siga funcionando igual de bien que hasta ahora.
