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Hacer una prueba de launch-control con una motocicleta de casi 210 cv de potencia en una carretera comarcal sin arcenes y abierta al tráfico quizás no sea la mejor de las ideas, sobre todo cuando llevas entre tus piernas toda una MV Agusta Brutale 1000 RR, una de las naked más bestiales y caras del mercado con un precio de 30.000 euros + impuestos.
El conocido Youtuber francés SCRAT tuvo la oportunidad de ponerse a los mandos de esta exclusiva motocicleta italiana durante uno de sus vídeos, una experiencia que a punto estuvo de acabar en un grave accidente de no ser por una mezcla de pericia y suerte que no evitó que este popular Youtuber galo acabara en el hospital.
SCRAT -que también edita y graba vídeos profesionales bajo encargo- había acudido a un pueblo de la Alsacia francesa para realizar una grabación dentro de una empresa especializada en la rotulación de vehículos. Para darle más picante al vídeo, los propietarios del establecimiento habían conseguido una MV Agusta 1000 RR de un cliente para captar varios ángulos durante el proceso de vinilado, dando como resultado un diseño espectacular.
Tras acabar la grabación, y viendo que el día era perfecto, se animaron a dar una vuelta con la moto y ya de paso hacer algunas tomas en carretera abierta. Durante uno de los parones de la grabación, SCRAT quiso comprobar cómo funciona el sistema de Launch Control de la Brutale 1000 RR, y no dudó en grabarlo con su cámara onboard.
Durante los primeros metros, acostumbrado a los 115 cv de su Yamaha MT-09, el Youtuber no deja de lanzar exclamaciones al comprobar la contundente aceleración que ofrecen los 207 cv del motor tetracilíndrico de la MV Agusta. Sin embargo, toda esta exaltación le hace distraerse y no se da cuenta de que tiene una curva por delante y que, además, hay otros motoristas circulando en ambas direcciones.
La velocidad a la que toma la curva le impide mantenerse dentro del asfalto y acaba sobre la hierba a más de 100 km/h, llevándose además un fortísimo golpe en su pie derecho contra uno de los postes de madera de la valla que discurre paralela a la carretera.
Milagrosamente, SCRAT consigue mantener recta la MV Agusta y evita lo que habría sido un doloroso accidente tanto para su bolsillo como para su físico, aunque eso no evitó que se fracturase el pie derecho y que la jornada de grabación acabara en un hospital cercano.
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Moraleja: si pruebas una moto que no es tuya y que además tiene una potencia que casi dobla a tu montura actual, hazlo siempre en un entorno controlado, sin tráfico... ¡y sin estrujarle la oreja desde el primer metro!
Aquí puedes ver el vídeo: