 Redacción @todocircuitoweb |
Aleix Espargaró se ha encontrado con una inesperada y desagradable sorpresa hoy en Mugello. Diez días después de su intervención en el brazo derecho para solucionar su problema de síndrome compartimental, el piloto de Aprilia ha empezado a sentir un intenso dolor al manillar de su RS-GP durante los primeros compases del FP1 del Gran Premio de Italia, una sensación que ha ido a peor con el paso de las vueltas.
Tras acabar 9º en la combinada de los dos libres, el #41 de Aprilia ha acudido a la Clínica Móvil para que le miraran el brazo, y tras una primera exploración los médicos han decidido sacarle todo el líquido que se había formado en el interior del antebrazo operado, momento en el que Aleix ha podido respirar de alivio.
El catalán sabe que mañana se volverá a repetir esta situación, por eso intentará dosificar sus fuerzas con el objetivo de no sobrecargar el brazo y llegar el domingo a la carrera en el mejor estado de forma posible.
La operación fue perfecta, pero la formación de líquido es algo que no se puede controlar: "No es normal. Después de la operación estaba muy bien, tenía mucha confianza, pero esta mañana después de unas pocas vueltas empecé a sentir mucho dolor, tengo mucho líquido en el brazo. Después del FP2 tenía todavía más, así que me fui a la Clínica Móvil y me han quitado unos 30 mililitros, que es mucho en un brazo. En cuanto me quitaron el líquido dejó de dolerme y siento muy bien el brazo, pero me han dicho que al ser un circuito tan exigente y haber pasado sólo diez días desde la operación, es posible que mañana vuelva a salirme líquido. No es tan fácil retirarlo porque se puede crear una infección, así que mañana no será un día fácil. Intentaré limitar los daños y no dar demasiadas vueltas".
Una lástima este dolor, porque Aleix está cómodo en Mugello: "Hoy me sentía fuerte y muy competitivo aquí en Mugello, en una pista difícil, pero no esperaba sufrir tanto en el brazo, sinceramente. Mañana no será un día fácil. No me falta fuerza, pero me duele muchísimo, no podía dar más de tres vueltas sin que me empezara a doler. El médico me ha dicho que cuando tienes tanto líquido en el brazo te empuja los músculos y es normal que duela. En cuanto me lo quitaron el dolor se fue".
No está frustrado porque es algo que médicamente no puede controlar: "No, no estoy frustrado. Cuando pasas por quirófano no es como ponerte una tirita, estas cosas pueden pasar. La operación fue súper bien, Marcos Ramírez por ejemplo no pudo mover los brazos hasta seis días después de su operación, yo un día después de la operación estaba perfecto y con el brazo súper bien. Cuando estresas el brazo unos días después de una operación como esta es normal que salga líquido. No estoy frustrado, soy positivo".
Su abandono en Francia no fue por rotura de motor: "Lo de Francia fue un problema menor, de electrónica, se rompió un sensor que por seguridad para la moto, y la verdad es que fue un suspiro, porque ese motor con el que salí en agua tenía 100 kilómetros, era nuevo. Ha sido positivo que sólo fuera un sensor, es algo que te frustra, pero es mejor que sólo sea un sensor y no que se rompa el motor".
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Andrea Dovizioso le ha acompañado hoy en Mugello: "Andrea sólo estará hoy, pero es genial tenerle aquí. Hace sólo un mes hizo un test, lo pasó bien, luego hizo otro y ahora le tenemos aquí. Cada vez está más ilusionado con nuestro equipo, hoy estaba en pista y también en mi reunión técnica, luego hemos estado una hora hablando de distintos puntos de vista y cosas sobre la moto. Es genial tenerle. No sé si es correcto decirlo así, pero para mí es un ídolo, siempre he admirado su modo de trabajar, lo inteligente que es sobre la moto... tenerle trabajando con nosotros es un placer, espero que pueda aprender algo de él y que nos ayude a mí y a todos los ingenieros. Mañana no estará aquí, pero poco a poco se está acercando a nuestro equipo. ¿Si me ha dado consejos? Sí, pero me los guardo para mí (risas)".
Su opinión sobre los pilotos que han rodado despacio en el FP2 buscando una buena rueda: "Yo estaba forzando hasta que vi a estos cuatro o cinco pilotos cortando gas. No quiero decir nada, había cámaras y todo el mundo lo ha visto. No quiero culparles, pero lo que hicieron es totalmente incorrecto y se ha podido ver en directo. No tengo más que decir".
