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Salir en moto con tu grupo de colegas y amigos es una de las mejores cosas que te pueden suceder un fin de semana, especialmente si todo el grupo tiene un ritmo similar y hay cierta compenetración a la hora de entender cuándo se puede ir ligero y cuándo es necesario aflojar el ritmo.
En ocasiones, cuando un grupo de amigos se junta, es frecuente que se incorpore algún invitado extra de última hora, un "amigo de un amigo" o un familiar que también tiene moto y está aburrido de salir a rodar en solitario.
Estos inesperados compañeros de ruta no suelen conocer el ritmo de los demás, ni tampoco están acostumbrados a las señas que se hace el grupo para alertar de peligros, paradas o cualquier otro imprevisto que pueda surgir en la carretera.
Este vídeo grabado hace unos días en Estados Unidos es un claro ejemplo del peligro que puede entrañar salir en grupo con gente ajena que, además, se enciende con facilidad sobre una máquina de 200 cv de potencia.
Tal y como se puede apreciar en las imágenes, los que van abriendo camino llevan un ritmo más que ligero, rozando en algún momento las 120 mph (casi 200 km/h) en una carretera convencional, sin importarles adelantar en doble continua.
Cuando la carretera termina y llegan a un STOP, todos levantan la mano para señalar su parada... hasta que llega el invitado sorpresa a una velocidad tan alta que intenta frenar y pierde el control de la moto, llevándose por delante a un miembro del grupo con una Yamaha R1 recién estrenada que milagrosamente sale andando del lugar del accidente, aunque con un fortísimo golpe de regalo en la zona lumbar.
El motorista que provoca todo este caos acaba en el otro lado de la carretera después de atravesar un cercado de madera, milagrosamente vivo. Según el autor del vídeo tuvo que pasar varias veces por quirófano, pero sobrevivió al accidente.
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Aquí puedes ver la secuencia completa.... y recuerda, cuando vayas en grupo, ¡mil ojos siempre!