Foto: Motogp.com
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Johann Zarco volvió a verse involucrado en una caída con otro piloto durante el Gran Premio de Catalunya, aunque en esta ocasión el francés no pudo hacer nada por evitar la catástrofe. El piloto del Esponsorama Racing sabía que la de Montmeló era su última oportunidad para conseguir un resultado brillante que obligara a Ducati a replantearse la elección de Pecco Bagnaia para el equipo oficial del próximo año, una alineación que se hará pública a lo largo de esta misma semana.
Lejos de eso, la carrera de Zarco duró 800 metros: la distancia que hay desde la línea de salida del Circuit de Barcelona-Catalunya hasta su segunda curva, donde el galo se fue al suelo al evitar un contacto con la Ducati de Danilo Petrucci, una maniobra que también acabó con Andrea Dovizioso rodando por la escapatoria de esa fatídica curva dos al no poder esquivar la moto de Zarco.
El piloto de Cannes reconoció al término de la carrera que había sido "un día muy malo" para él, sobre todo porque su ritmo, sin ser el mejor, le habría permitido luchar por posiciones delante: "Había mejorado mis tiempos por vuelta durante el fin de semana de una sesión a otra. También tenía un buen ritmo de carrera, pero mis esperanzas se esfumaron en la curva dos".
Zarco confesó que sus sensaciones durante la salida "no fueron malas", aunque se vio sobrepasado por varios pilotos: "Petrucci frenó muy bien antes de llegar a la curva uno, y antes de eso me pasaron una Suzuki y otra moto acelerando. Ya había perdido tres posiciones desde la salida".
Johann no tuvo más remedio que quedarse en medio del pelotón en el cambio de dirección de la curva uno a la tres, y fue ahí donde acabó su carrera: "Petrucci tuvo un susto al intentar evitar contactar con una de las KTM, y yo tuve que frenar para no golpearle. No frené muy fuerte, pero en cuanto toqué la leva de freno al estar inclinado, me caí. Fue una lástima para mí y para 'Dovi', pero así son las carreras por desgracia".
En opinión de Zarco, la temperatura tan fría que tuvieron que soportar el domingo en carrera fue clave a la hora de explicar el elevado número de caídas que se produjeron en ese punto, una curva en la que Valentino Rossi también perdió el tren delantero de su Yamaha cuando rodaba segundo: "En la segunda curva vas al límite por culpa de la temperatura, algo que quedó demostrado con más caídas en ese punto. Estoy decepcionado porque calculaba que lograría un buen resultado. Al menos no me lesioné".
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El francés, consciente de que este cero echa por tierra cualquier opción de irse al equipo oficial Ducati en 2021, sólo espera hacer un buen papel en casa dentro de dos semanas, aunque al igual que el resto de pilotos avisa del frío que hará en Francia a mediados de octubre: "Ya estoy pensando en Le Mans, espero que no haga demasiado frío. Michelin normalmente lleva neumáticos más blandos allí para que podamos trabajar menor con temperaturas bajas".