 Redacción @todocircuitoweb |
Jorge Martín digo un giro de 180º a su temporada durante las dos últimas rondas celebradas en el Red Bull Ring. Los 45 puntos que cosechó el piloto madrileño tras ganar el GP de Austria y ser segundo en la carrera de Estiria le han permitido escalar varias posiciones en la general del campeonato hasta colocarse tercero empatado a puntos con Ene Bastianini, a sólo ocho puntos del líder provisional Luca Marini.
El que fuera campeón del mundo de Moto3 en 2017 ha valorado de forma muy positiva la estabilización del proyecto del Red Bull KTM Ajo en la categoría intermedia, especialmente desde que la fábrica austriaca decidió renunciar a seguir participando en Moto2 con un chasis propio a mediados de 2019, momento en el que Martín empezó a sentirse cómodo son su KTM-Moto2 al mantener la misma base durante toda la segunda mitad de la temporada.
"La moto que teníamos el año pasado no estaba al nivel", ha declarado el español en una entrevista ofrecida a Motogp.com. "Cada vez que me subía era una moto totalmente nueva, así que para un rookie probar una moto nueva en cada ronda fue super difícil. Cuando KTM decidió detener la evolución de la moto, empecé a sentir que entendía la moto y llegó el primer podio, y luego el segundo consecutivo. A final de año estaba haciendo primera línea y luchando por podios, fue una buena experiencia".
Aunque este año Jorge sigue dentro del mismo equipo bajo la tutela de KTM, la máquina que pilota es una Kalex con motor Triumph, una moto a la que se ha adaptado rápidamente y con la que ha conquistado una victoria y dos podios en seis carreras, destacando especialmente su triunfo en la casa de KTM, el Red Bull Ring: "Fue algo increíble, mi primera victoria en Moto2. Lo estaba buscando de verdad, ese fin de semana no me esperaba ganar, sabía que iba rápido y que era competitivo en este circuito, pero ganar de ese modo escapándome de los demás fue algo increíble. Esto me da más motivación para el futuro, ahora estoy más cerca del título y puedo empezar a pensar en él".
Aunque Martín tiene todavía más de media temporada por delante para pelear por la corona de Moto2, en su interior sabe que su salto a MotoGP es inminente, y salvo sorpresa de última hora, se hará efectivo en 2021, posiblemente dentro de las filas del PRAMAC Racing cubriendo la baja de Jack Miller, acompañado por Johann Zarco o Pecco Bagnaia en función de quién de los dos suba al equipo oficial.
Pesa a que la noticia de su futura llegada a MotoGP cogió fuerza hace meses, el madrileño todavía no sabe cuál será su futuro con certeza, aunque cabe la posibilidad de que Ducati y PRAMAC formalicen su acuerdo la próxima semana con motivo del Gran Premio de San Marino.
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"Estoy trabajando para saltar a MotoGP el próximo año", comenta Martín, "está casi cerrado, pero ya sabes, necesitan algunos resultados y yo también necesito sentir que estoy preparado para irme. La meta es ir a MotoGP, pero mi primer objetivo es ganar el Mundial de Moto2. Diría que voy a ir a MotoGP al 95%, el año que viene o en un par de años, no lo sé, quizás esta sea mi única oportunidad de ser campeón en Moto2, y estoy centrado al 100% en este objetivo", sentencia el español.
