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 Redacción @todocircuitoweb |
Aunque Jorge Lorenzo lleva tiempo insistiendo en que su retirada como piloto profesional es definitiva a un 98%, lo cierto es que dentro del paddock son muchos los que ponen en duda el adiós total del piloto español al Mundial de MotoGP.
A sus 32 años, Lorenzo todavía está en una edad en la que podría seguir compitiendo perfectamente al máximo nivel durante varias temporadas más. El mejor ejemplo lo tiene dentro del box para el que trabaja actualmente, con un Valentino Rossi que está dispuesto a seguir corriendo hasta los 42 ó 43 años, y hay otros pilotos como Andrea Dovizioso o Cal Crutchlow que nacieron dos años antes que Lorenzo y que todavía quieren seguir en activo al menos dos temporadas más.
Lorenzo dejó claro en su discurso de retirada que las lesiones que había sufrido con Honda en su último año fueron decisivas a la hora de meditar esta retirada tan prematura, especialmente las fracturas que sufrió en dos de sus vértebras como consecuencia de las caídas que sufrió primero en Montmeló, durante un test, y después en los entrenamientos libres de Assen.
Su delicado estado físico y los malos resultados que estaba cosechando con la RC213V terminaron por llevar a Lorenzo a una ruptura del acuerdo que mantenía con HRC hasta 2020, una salida amistosa que permitió a Alex Márquez ascender al equipo de fábrica junto su hermano Marc.
Yamaha contactó con el #99 días después de anunciar su adiós en Valencia, y Jorge tardó muy poco en aceptar la oferta de su ex-equipo para colaborar con ellos en el desarrollo de la YZR-M1. Las semanas pasaron, Lorenzo empezó a encontrarse bien a nivel físico y ese hambre de competir y luchar por victorias empezó a despertar de nuevo en él, unas sensaciones que se intensificaron todavía más cuando tuvo la oportunidad de probar la Yamaha en el primer test del año en Sepang.
Allí se vio a un Lorenzo espléndido, con una sonrisa de oreja a oreja y un brillo en sus ojos que había desaparecido desde hacía meses. Y fue ahí, en pleno test de Sepang, cuando se empezó a rumorear que el piloto español se podría estar arrepintiendo de su decisión de colgar las botas, un runrún que cobró más fuerza cuando Yamaha anunció el wildcard de Jorge con motivo del Gran Premio de Catalunya, un plan que finalmente se ha ido al traste por la pandemia de coronavirus y la decisión de organizador y fabricantes de no permitir la inscripción de pilotos invitados este año.
Ahora, tres meses después de aquel primer test en Sepang, el director general del Petronas Yamaha, Razlan Razali, ha asegurado en una entrevista ofrecida a Motogp.com que Lorenzo se acercó al box del equipo malasio para preguntar por las opciones que tendría de correr con ellos en 2021.
"Hablé con Jorge en Sepang durante el test", cuenta Razali. "Parecía entusiasmado y rejuvenecido en lo que respecta a su pasión por correr de nuevo. Me preguntó... pero nosotros no podíamos comprometernos, era muy pronto. Si fuese un campeonato normal, hiciera algún wildcard y lo hiciera bien, todo posibilidad está abierta", asegura el mandamás de Petronas.
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Razali sabe que la moto de Quartararo es una de las más codiciadas del paddock, y aunque la lista de candidatos a esa YZR-M1 es muy larga, a día de hoy la apuesta más clara de Petronas pasa por darle esa moto a Valentino Rossi: "Todo el mundo quiere correr con una Yamaha, ex-pilotos, pilotos en activo, cualquier rookie... tendríamos mucho donde elegir en caso de ser una temporada normal, pero no lo es. Ahora mismo para nosotros es muy difícil considerar a Jorge Lorenzo o cualquier otro ex-piloto de MotoGP", concluye el malasio.
