Foto: WorldSBK.com
 Redacción @todocircuitoweb |
Un año después del escándalo que se produjo en la cita aragonesa del Mundial de Superbikes entre Imre Tóth y Héctor Barberá, sigue sin aparecer la Yamaha R6 del equipo húngaro con la que el piloto de Dos Aguas arrancó la temporada 2019 del Mundial de Supersport.
Lo sucedido dentro del box del equipo de Imre Tóth fue, sin duda alguna, una de las situaciones más rocambolescas que se han vivido en los últimos años dentro del paddock del WSBK. El ex-piloto húngaro denunció ante la Guardia Civil de Alcañiz el robo de la motocicleta del equipo el domingo por la mañana, sólo unas horas antes de que arrancara la carrera de Supersport 600 de Aragón.
Tóth no dudó en señalar públicamente al propio Héctor como el autor del robo, asegurando que el piloto español le había llamado por teléfono para comunicarle que la moto estaba escondida en lugar seguro, pidiéndole además un importe económico en concepto de rescate si quería volver a verla.
Barberá, por su parte, negó en todo momento cualquier implicación en el robo, y tanto él como sus mecánicos más cercanos revelaron que el equipo húngaro no les había abonado ni un euro de su sueldo en lo que llevaban de temporada, además de obligar a Héctor a correr con motores usados al límite de su fiabilidad al no disponer del presupuesto necesario para tener una moto en condiciones.
Ahora, un año después de toda aquella polémica, Imre Tóth ha hablado para Speedweek.com sobre aquel desagradable suceso que ahora mismo está en manos de un tribunal español: "Hice lo que tenía que hacer e informé a la policía. Espero que la encuentren. Es una moto moto preparada por buenos mecánicos"
"¿Cómo puede desaparecer una moto en un circuito moderno entre las 20:45 y las 22:00 de la noche?", se pregunta el ex-piloto húngaro. "Es una broma que sólo hubiera dos cámaras instaladas en el paddock. De hecho, a petición de Barberá, nuestra moto fue sacada del box por dos mecánicos españoles. ¿Por qué lo sé? Estaba comiendo con mi padre y otros dos mecánicos del equipo y le dimos las llaves del box a los españoles".
Tóth insiste en su versión de que fue Barberá quién le robó la moto para pedirle dinero a cambio: "Después de que la policía investigó en nuestro box el domingo por la tarde, Barberá me llamó sobre las 16:00 y me dijo que la moto estaba en un lugar seguro y que quería negociar. Que debía ir yo solo y sin teléfono móvil. ¿Perdona? Después de esta farsa, le dije que lo dejaba en manos de la policía".
De momento, la pandemia de COVID-19 que mantiene paralizado a medio planeta impide a Imre Tóth conocer novedades sobre la localización de su moto: "La situación del Coronavirus está siendo difícil para mí porque mi abogado no puede viajar. La policía entregó todas las pruebas al tribunal. Deberíamos haber tenido una reunión con el abogado en Alcañiz el pasado mes de abril, pero por ahora no podemos hacer otra cosa que no sea esperar".
El húngaro ha asegurado tener una grabación en su poder en la que, supuestamente, los mecánicos de confianza de Héctor Barberá reconocen todos los hechos: "Tengo un testimonio de 1 hora y 40 minutos de los mecánicos españoles diciendo que ellos robaron la moto porque Barberá no quería hacerlo él mismo. Podemos usar eso en el tribunal. Ha pasado mucho tiempo desde aquel incidente, no sé si la moto seguirá en su estado original. Aquella temporada me costó al menos 50.000 euros, y también perder a muchos patrocinadores. Para Barberá, lo que me hizo a mí y mi equipo será malo al 100%. En cuanto pueda viajar de nuevo, presionaré otra vez en este tema".
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Mientras llega el desenlace de este desgradable asunto, Barberá se mantiene a la espera de la renudación del British Superbikes 2020, campeonato en el que participará por primera vez a tiempo completo -el año pasado ya disputó alguna carrera suelta- a los mandos de la BMW S 1000 RR del OMG Racing.
